El Cuéntalo vuelve a poner en jaque el ámbito educativo y parece que no se salva nadie. La semana pasada fue el turno de Arquitectura y esta vez le tocó a la facultad de Medicina, donde alumnas de la casa de altos estudios denunciaron a través de una cuenta de Instagram situaciones de violencia y acoso por parte de profesores y ayudantes.
Pero eso no fue todo. Además las alumnas escracharon a los acusados colgando carteles en la propia universidad y en las inmediaciones del hospital Centenario.
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Marcela Salvia, secretaria Estudiantil y docente, se refirió a las acusaciones contra un médico ginecólogo al que se lo señala como violador y rechazó el hecho. “Nosotros repudiamos la utilización política de denuncias anónimas, no negamos que sea un problema grave, todo lo contrario, pero creemos que esta exposición banaliza, vulnera los derechos y revictimiza”, observó en contacto con LT2.
Más allá de esta situación puntual, Salvia consideró necesario avanzar en un protocolo de actuaciones por violencia de género en el ámbito de la facultad y de la universidad en general. “Hay un pedido por parte del decano del tratamiento urgente de un protocolo para todo el ámbito”. Según explicó, existe actualmente un procedimiento de acción pero es general, es decir, está diseñado para situaciones de violencia pero no incluye una perspectiva de género. 
Desde la Facultad de Ciencias Médicas informaron que no hubo denuncias formales contra ningún docente. Este jueves presentarán ante el Consejo Directivo un proyecto de protocolo para atender situaciones de acoso o violencia similar a los que funcionan en las otras facultades.
