Debería ser fútbol, sin embargo el clásico de la ciudad implica mucho más que eso. El fútbol y la violencia parecen ser inseparables. A tan solo un día del encuentro entre leprosos y canallas, ya aparecen muertes, hechos de inseguridad y disturbios en las calles de Rosario. En la gente de Central provocó jolgorio, en la de Newell´s agresión y bronca.

Tras el triunfo canalla dos hombres que festejaban perdieron la vida. El primer caso corresponde a un asesinato producido en Brasil al 1300, donde la víctima recibió un disparo en la zona dorsal luego de que un vecino le disparara sin reservas. El hombre fue trasladado del Sies al Heca, donde cerca de las 21 falleció. El presunto autor está identificado y se encuentra prófugo. El hecho es investigado por la subcamisaría 22° con jurisdicción en la zona.

El otro asesinato implica a un joven de 22 años que fue herido de arma blanca. A los pocos minutos, su padre lo traslado al Heca, donde cerca de las 21 perdió la vida. Personal policial detuvo al supuesto autor del hecho en cercanías del lugar.

El transporte también tuvo lo suyo. Varios colectivos fueron destrozados por hinchas leprosos: ventanillas despedazadas, asientos rotos y vidrios por todos lados. A su vez, los propios conductores sufrieron insultos y amenazas lo que provocó el paro de la Unión de Tranviarios Automotor (UTA). Para evitar mayores disturbios y hasta posibles muertes, los colectiveros decidieron parar y la ciudad sufrió la ausencia del servicio por aproximadamente tres horas.

Por su parte, algunos taxistas también adhirieron a la medida y no prestaron servicio o decidieron hacerlo en zonas alejadas de las inmediaciones del barrio Arroyito.

En los alrededores del Coloso también hubo desmadres. Los autos de los jugadores aparcados en el playón del estadio fueron violentados por propios hinchas del club, quienes rompieron las ventanillas, rallaron las puertas y abollaron los autos a golpes y palazos.

Mientras algunos hinchas rojinegros se “encargaban” de los jugadores, otros se dedicaban a los directivos. Un grupo de fanáticos se dirigió a la casa de Guillermo Lorente en Jujuy y Roca, quien se encontraba reunido con otros dirigentes del club, para exigirle explicaciones. Lorente dio la cara, salió de su casa para responder a las demandas y la situación no pasó a mayores.

En cuanto a lo deportivo, el DT de Newell´s frente al resultado del partido y frente al bajo rendimiento que viene mostrando el equipo, afirmó que tienen su renuncia a disposición. Sin embargo, hasta el momento, fue rechazada por el cuerpo directivo y Raggio seguiría al mando del equipo leproso.

Claramente los incidentes no fueron pocos y es penoso reconocer que el clásico de la ciudad venga acompañado de hechos semejantes. Sin embargo, nunca hay que dejar de soñar con un clásico sin violencia.