Por Alejandro Maidana

La Escuela de Educación Técnica Nº392 Juramento de la Bandera de Rosario está enclavada en Avenida San Martín 5702, en el barrio Tiro Suizo. Dicha institución a través de un proyecto de construcción y rehabilitación provincial, y en base a los principios del mismo, buscará consolidar un uso extensivo e intensivo del edificio, flexibilidad funcional, ambientes saludables y construcción eficiente.

Si bien la obra está en marcha, la demora y las falsas promesas han puesto en alerta a familias y docentes que propugnan respuestas sinceras para de esa manera poder organizar un año lectivo teñido de incomodidad e incertidumbre. Entre la intervención del viejo edificio y las nuevas construcciones, hay que hablar de unos 7.467 metros cuadrados de obras. Cabe destacar que se trata de una realización sumamente importante e imprescindible, con un aditamento que no puede quedar al margen, las demoras y falta de respuestas.

Para comenzar una obra de tamaña magnitud, lo primero que se tuvo que haber garantizado, es un lugar donde llevar adelante los talleres. Se trata de 26 divisiones con un total de 600 alumnos, los cuales quedaron sin un lugar donde obtener debidamente sus clases. “En noviembre se hizo una licitación para la remodelación completa de la escuela, y en enero se hizo la entrega de llave para la reforma a la empresa. Antes de que arranque todo, se había dicho que la institución completa se iba a ir al batallón, por lo cual las obras que se tenían que hacer en el batallón para albergar a los estudiantes, arrancaron en el mes de febrero. O sea, un mes después que comenzaron las obras de la escuela, quedando de esta manera la escuela técnica sin lugar donde dictar clases”, sostuvo Sonia, integrante de la cooperadora de la institución y mamá de un alumno.

Debido a esto, el director de la institución se comunicó con sus pares de la escuela Dr. Luis María Drago con la intención de lograr acceder a algunos salones que posibiliten la continuidad educativa. “Se logró que puedan cedernos tres salones, allí se dictan clases de media jornada, tanto en el turno mañana como en el turno tarde con solo tres cursos por turno. Hemos sido invitados por gente del Ministerio de Educación a recorrer las obras en el Polo Tecnológico, al cual faltan muchísimas cosas todavía. Hace poquito más de 20 días atrás, hicimos una convocatoria en la puerta de la escuela para pedir que se avancen las obras, que no queden paradas”.

Por ello surgió la promesa que en 20 días se iba a hacer entrega del Polo Tecnológico. Lamentablemente la promesa nuevamente quedó en saco roto. “Obviamente esos 20 días se cumplieron, después de esos 20 días nos dijeron que finalmente la fecha de entrega sería el 30 del mes pasado. Alertados por esto, accedimos al lugar para contemplar las obras, percatándonos que aún le falta las separaciones de aulas en los espacios más grandes, y muchas instalaciones, como calefacción entre otras cosas. Debemos destacar que hablamos de una escuela técnica la cual no tiene talleres y tampoco espacios para poder llevarlos adelante”.

Los alumnos de sexto año que se tienen que recibirse de la parte técnica pero no tienen cómo hacerlo. “Estamos en la lucha, porque a pesar de que el ministro de educación se acercó a recorrer las obras, y envió a personas desde Santa Fe para que realicen un seguimiento de las mismas, todavía resta muchísimo por hacer. Entendemos que se trata de un tema netamente económico, ya que, si hay plata, la gente de la obra avanza, de lo contrario la misma se paraliza. Es como cualquier albañil que va a hacer un trabajo, si le pagas va a trabajar, de lo contrario ya sabemos cuál será su devolución. Entonces el tema acá es económico. Como familias estamos muy preocupados por la situación, insistiendo, presionando, comprometiéndonos en todo lo que está a nuestro alcance. Como así también estamos acompañando tanto a los chicos, como al directivo de la escuela y a toda la institución, necesitamos que las obras avancen y finalicen”.

El alumnado ya hipotecó medio año, supuestamente las obras finalizarían luego del receso invernal. “Consideramos que se trata de una nueva y vaga promesa que lejos está de poder cumplirse, la verdad, cuesta mucho creer que después del receso los chicos tengan el lugar adecuado para poder comenzar como corresponde su ciclo escolar. Con el pedido que realizamos al Ministerio, y nuestra inclaudicable insistencia, logramos que se nos entregue la Nave 3 para poder tener parte de los talleres. Este espacio se está acondicionando gracias a que conseguimos que el FAE (Fondo de Asistencia Educativa del Municipio) nos ayude a limpiar el espacio mencionado para de esa manera comenzar con los imprescindibles talleres”.