Organizaciones ambientalistas y el concejal de Todos Hacemos Rosario, Lisandro Cavatorta, consiguieron que este miércoles comience a retirarse el cerco perimetral del Parque Independencia donde iba a construirse el natatorio olímpico.

Es importante mencionar que este cerco perimetral se ubicó en Ov. Lagos y Presidente Perón para la obra de la pileta olímpica en el marco de los Juegos Suramericanos de la Juventud; una vez finalizada la competencia, esta zona del espacio público continuaba cerrada para los vecinos y Cavatorta, junto a «Amigos del Parque Independencia» y ambientalistas se reunieron para contemplar alternativas e intentar recuperar este espacio verde para los rosarinos.

«Junto a Adrián D’alessandro de la asociación ‘Amigos del Parque Independencia ‘, la ONG ‘Protegiendo nuestros árboles ‘ y muchas otras organizaciones ambientalistas, sumado a los vecinos, pensamos que había que parar la pelota, sacar el cerco, y devolver las 3 hectáreas del espacio público para que las familias puedan volver a disfrutarlo», resaltó el concejal de Todos Hacemos Rosario.

El edil destacó la buena predisposición de la ministra de Infraestructura Silvina Frana y de la Secretaria de Obras Públicas, Leticia Battaglia, que escucharon a los vecinos y contemplaron la posibilidad de retirar el cerco perimetral mientras avanzan las discusiones en torno al destino de la obra y su localización.

«Nos juntamos, conversamos, a partir de reclamos de organizaciones ambientalistas, de los Amigos del Parque Independencia, para que ganemos todos, que no se tale ningún árbol acá, y que la gente pueda volver a tener este espacio público para esparcimiento en el fin de semana», celebró Cavatorta este miércoles en declaraciones a Conclusión.

«Así además -continuó- la ciudad recuperará un pulmón verde en el Parque Independencia, que debemos cuidarlo, respetarlo y mejorarlo. Hoy ganamos todos: no está el cerco y vuelve el espacio público a los vecinos; no se tala ningún árbol y mientras tanto discutimos dónde va la pileta».

El edil incluso sugirió que la obra sea llevada a algún otro barrio de la ciudad, para revitalizarlo, darle obra pública y sumarle presencia del Estado.

A su turno, Adrián D’alessandro, de Amigos del Parque Independencia, festejó el retiro del cerco y sostuvo ante Conclusión que la obra era «un contrasentido enorme, más cuando estamos asistiendo al cambio climático y luchamos por nuestros humedales.

D’alessandro detalló que la construcción de la pileta implicaba talar entre 18 y 20 árboles de altísimo valor patrimonial, que están en perfecto estado fitosanitario, y cambiarlos «por toneladas de cemento que caerían en un espacio verde de uso público que se iba a perder para siempre».