Tres sospechosos de haber participado en el ataque de 13 tiros al inspector de inteligencia César Eduardo Carmona, fueron detenidos en distintos procedimientos llevados a cabo en Rosario entre el sábado y la madrugada del domingo. Todos serán llevados a audiencia imputativa por el fiscal Alejandro Ferlazzo el próximo martes.

Se investiga si los arrestados tienen vinculación con la presunta banda liderada por el clan Romero, que opera en la zona norte y que fue desbaratada por la División de Inteligencia de la Agencia de Investigación Criminal, lugar en el que trabajaba la víctima, en una causa por el homicidio de un dirigente de la Uatre, ocurrido en noviembre del año pasado en Buenos Aires.

El principal sospechosoAgustín Alfredo A. de 22 años, fue encontrado en una casa del barrio Puente Gallego. Es quien se presume que realizó los disparos contra el inspector el jueves pasado en la puerta de la Agencia de Investigación Criminal.

En tanto, «Calamar», como se lo conoce, ya tenía pedido de captura del Juzgado N° 1 de Garantías de Pergamino por haber sido el sicario que mató a Mauricio Cordara de la Uatre en Colón, provincia de Buenos Aires.

Agustín A. es hijo de un policía que fue arrestado por haber facilitado en enero de 2014 la fuga de un miembro de Los Monos del edificio de la Jefatura de la Policía a cambio de dinero. Ese ex agente además luego fue detectado en escuchas telefónicas hablando con un preso para intentar planear el asesinato del juez Juan Carlos Vienna, quien impulsó la causa contra los Cantero.

Por otra parte, Alan Nahuel A.  de 22 años, fue detenido en un allanamiento hecho por el Grupo de Irrupción de Respuesta Inmediata, en Camilo Aldao al 3800, en Vía Honda. Y Fernando C. también de 22 años, fue aprehendido por el Comando Radioeléctrico en José Ingenieros al 8300, en la zona noroeste de Rosario, a quien se le incautaron pasamontañas, precintos, ropa y un celular que será enviado a peritar.

 Por los indicios que tienen los investigadores, Fernando C. fue quien rompió una de las ventanillas del Fiesta Kinetic de Carmona para llevarse una mochila, ya que tenía heridas en una mano.

El indicio de que Fernando C. había sido quien rompió uno de los cristales del Kinetic radicaba en que se habían encontrado manchas de sangre en el C3 en el que se desplazaban los atacantes y que fue encontrado sin ocupantes en Sánchez de Bustamante al 400.

Cabe destacar que los tres sospechosos, según los datos que tiene los investigadores policiales, después de abandonar el C3 se subieron a un Gol Trend gris para terminar de fugarse. El Gol fue secuestrado este sábado a la madrugada en Caracas y Grandoli, en Nuevo Alberdi, territorio en el que opera hace años la presunta banda conocida como “Los Romero”.