Madres y padres de alumnos de los últimos años de escuelas primarias de diferentes puntos de Santa Fe comienzan a agruparse y reclamar por los altos costos. Señalan que es imposible abonar estas subas y puntualizan que “esto es algo que está sucediendo en toda la provincia”.
Autoconvocados por las redes sociales y en diferentes grupos de WhatsApp alientan a participar en una concentración en el Monumento a la Bandera este martes a las 19, y por la mañana están convocados a una reunión en la Secretaría de Comercio de Santa Fe.
Pilar Bonel, madre de un alumno de sexto grado de una escuela pública en Funes, explicó, en diálogo con Conclusión que “los precios que nos están pasando son de 300 a 350 mil pesos para un viaje de cinco días y cuatro noches a Carlos Paz para chicos de 12 a 13 años”, y puntualizó que este tipo de viajes de egresados “venía saliendo 45 mil pesos y los chicos que viajan este año lo pagaron 90 mil pesos. Nosotros habíamos calculado que iba a estar entre 140 a 180 mil”.
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“Esto es un abuso. Es una estafa”, criticó Bonel y amplió afirmando: “Entiendo que es un viaje y las empresas tienen que ganar, pero no me podés estar cobrando un viaje un 200% más de un año al otro”. En ese marco agregó que por el momento son varias escuelas donde los padres definieron no avanzar con la firma de los contratos e invitan a imitar la iniciativa. “Ya frenamos las reuniones con las empresas y les estamos diciendo que se replanteen los precios, porque si no no les vamos a dar ninguna reunión” aseveró.
Por su parte, Melisa Herrero, quien tiene un hijo en sexto año de la escuela Gurruchaga indicó que son precios “desproporcionados, superando la media inflacionaria” y estimó: “Son cinco días en Carlos Paz más lo que el chico se lleva para gastar, lo que representa que un nene de 12 años se gaste casi 100 mil pesos por día”.
El enojo y la indignación de los padres hizo que en este momento sean más de un centenar de escuelas de Rosario y distintas localidades de la provincia los que se pusieran en contacto y avanzar con la denuncia. La ley 25.599 -aprobada en 2002- fija los parámetros de los viajes estudiantiles y plantea cómo deben ser los contratos de servicios.
“Está clarísimo que esto es cartelización”, criticó Herrero y agregó: “De hecho, había escuelas que denunciaban que si vos no tenías pactada una reunión con dos o tres empresas en la misma semana no te daban la reunión. Entonces claramente ellos se estaban poniendo de acuerdo para ofrecer el mismo precio y creo que se les notó la jugada. Se encontraron con una realidad durísima. Es imposible pagar 20 mil pesos por mes durante 18 meses”.
“Creemos que es un abuso y que están jugando con la ilusión de los chicos, porque si bien el viaje no forma parte de la currícula, sí es parte de nuestra cultura y los chicos lo esperan”, dijo la madre del niño de la escuela Gurruchaga, para luego graficar que las empresas turísticas “saben que el ciclo básico se concluye con un viaje y creemos que es totalmente excluyente y discriminatorio poner este precio acordado por las empresas. Esto está totalmente acordado, cosa que está totalmente prohibido que se pongan de acuerdo para ofrecer un precio, por eso sentimos que discrimina a los niños claramente. Pedimos que se intervenga”.
