Luego de llevarse a cabo en Victoria una audiencia pública destinada a presentar el Plan de Manejo preliminar de la Reserva de Usos Múltiples “Humedales e Islas Victoria” (RUM) el pasado 22 de junio, desde distintas organizaciones pronunciaron este lunes su disconformidad sobre la estrategia a implementar, considerando que “el Plan de Manejo propuesto no es el mejor” pero, si bien no es el que pretende la mayoría de las entidades involucradas, sostuvieron que es “perfectible” y que “constituye un buen punto de partida para ordenar las diversas actividades en el territorio, equilibrando protección y producción”.
Desde Taller Ecologista, Multisectorial Humedales, El Paraná No Se Toca, Somos Humedal, Los Benitos Reserva Natural y Salvemos los Humedales emitieron un comunicado este lunes, apoyados por casi una veintena de entidades civiles y gremiales. A través del documento explicaron que en la audiencia pública participaron organizaciones socioambientales junto con diversos actores del territorio como productores ganaderos, apicultores, pescadores, isleros, concejales, funcionarios municipales y provinciales. Y reiteraron que se trata de un punto de partida para mejorar las condiciones en la que actualmente se encuentran los humedales.
“El plan tiene un 2 por ciento de zona intangible, lo que quiere decir que hay más de un 90 por ciento en donde se pueden hacer actividades, el lugar está muy descuidado, hay terraplenes, siembra de soja y más de 22 cortes de arroyos ilegales” señaló a Conclusión Javier Nuñez de Somos Humedal Victoria.
No obstante, destacó: “El plan tiene algo de bueno, ya que se prohíbe tanto el ingreso de terraplene como, de máquina pesada. Ha costado mucho y creo que es la primera experiencia en la que se trabajó colectivamente. Oponernos no estaría bueno, todo lo contrario, ya que cada cinco años se va a ir tratando o reformando. Sienta un precedente, lo que realmente está bueno”.
En el mismo sentido se expresaron las organizaciones a través del comunicado sobre la audiencia pública, considerando que tiene la virtud de ser el resultado de una de las primeras y pocas experiencias participativas respecto del ordenamiento en el Delta del río Paraná y por tanto queda mucho camino por recorrer. En otras palabras: es perfectible.
“Por esto es que apoyamos la aprobación e implementación de dicho Plan de Manejo, y por supuesto debemos (todos los actores) seguir trabajando mancomunadamente y colaborativamente con el proyecto”.
La mirada de isleños y baqueanos
“El enojo de algunos empresarios es que no van a poder sembrar y hacer terraplenes, Nosotros veníamos viendo que desde hace varios años se venían adquiriendo tierras a precios muy bajos y nos preguntábamos para qué querían una tierra que sólo tenía agua. Después nos dimos cuentas que era para hacer terraplenes, sembrar soja y fumigar. Si eso llega a seguir permitiéndose, en diez años no tenemos más humedal”, dijo un baqueano del lugar a Conclusión. Y alertó sobre cómo afectó el lugar el “gran dragado de la hidrovía” y que “se ha dragado tanto que las bocas están sedimentadas y no hay entrada de agua”.
Sobre los empresarios
“Desconciertan las manifestaciones negativas pronunciadas por representantes de las entidades ruralistas a las que nos hemos referido más arriba. El Plan de Manejo preliminar propuesto, posibilita continuar realizando prácticas de producción de alimentos, con el plus de poder implementar mejores técnicas, más sustentables y sostenibles. Por lo que no es verdad que el mismo contribuya a una inexistente “cruzada ambientalista contra la producción sustentable de agroalimentos”, como afirman en su nota”, señala el comunicado.
Los ambientalistas agregaron que “el statu quo sólo beneficia a unos pocos grandes empresarios y nos perjudica al resto, que tenemos derecho a disfrutar de los “bienes comunes” como lo es este humedal”.
“Sin pretender entrar en confrontación, no podemos dejar de advertir el asombroso contenido de la nota de la Sociedad Rural de Victoria. Entre otras cosas porque desde nuestra mirada el Plan de Manejo está hecho bastante a medida de las actividades productivas. Que al 90% del territorio se lo haya asignado como “Zona de uso extensivo”, y sólo el 2% sea destinado a zona intangible, da buena cuenta de esto. No nos gusta este y otros puntos del Plan, porque en definitiva da muy poco lugar a lo “múltiple” que justamente debe contemplar una Reserva de Usos Múltiples. Pero pensamos que es un piso para seguir avanzando”.
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