El último jueves se emitió un nuevo programa de Café Internacional por Conclusión TV, con la conducción de Santiago Toffoli y Emilio Ordoñez. En el mismo, se trataron temas ligados a la actualidad internacional de nuestros días.

En primer lugar, se analizó un nuevo capítulo del conflicto larvado entre Armenia y Azerbaiján en el enclave de Nagorno Karabaj, tanto en sus factores locales como internacionales. Seguidamente, desde el estudio se abordó todo lo referente a la reunión presidencial ruso-norcoreana y sus implicancias tanto para la guerra en Ucrania como para el frente del Pacífico. Por último, se regresó a la región para retomar sucintamente lo que dejaron las primeras sentencias por el intento de golpe de Estado en Brasil en enero pasado

A principios de esta semana el mundo fue testigo de una peligrosa escalada en la región del Cáucaso en el marco del conflicto entre Armenia y Azerbaiján por el enclave de Nagorno Karabaj, situado en territorio azerí pero con una población predominantemente armenia. Esta región, que ya ha sido testigo de dos guerras en el pasado (1988 y 2020), podría estar a las puertas de un tercer conflicto tras los ataques del ejército azerí sobre la capital de este enclave, Stepanakert.

El establecimiento de un cese del fuego por intermedio de Rusia, quien ve abrirse un frente de conflicto adicional al de la guerra en Ucrania, no ha acallado las acusaciones armenias de una operación de limpieza étnica en curso sobre la población karabají, mientras que del lado azerí se acusa a milicias irregulares del enclave de incentivar el conflicto.

El crecimiento de las tensiones en Nagorno Karabaj parece estar influenciada por las repercusiones regionales de la guerra entre Rusia y Ucrania, al mismo tiempo que abre oportunidades para actores regionales y extra regionales. En este sentido se conjugan varios factores: la imposibilidad de Rusia de gestionar militarmente dos conflictos simultáneos, los efectos negativos de la invasión a territorio ucraniano sobre los países de Asia Central que han generado cuestionamientos inéditos hacia Moscú, y los movimientos de países como Turquía, Irán e incluso los Estados Unidos.

Desde el programa se analizaron las posibles motivaciones del conflicto, la influencia de la guerra ruso ucraniana en el mismo y como los actores externos tallan en la dinámica de un conflicto que está lejos de cerrarse.

Casi en simultáneo con este nuevo escenario de tensión, tuvo lugar la cumbre bilateral entre el presidente ruso, Vladimir Putin, y su par norcoreano, Kim Jong Un, sita en la ciudad de Vostochni, en el Lejano Este ruso. Una reunión ya anticipada por la inteligencia y los medios de prensa estadounidense, que ha despertado aprensiones por lo que podría constituir el principio de una alianza entre ambos países en el marco de la guerra ruso-ucraniana.

En tanto se especulaba con la posibilidad de que Corea del Norte suministrara artillería y armamento liviano dirigido al frente de guerra, mientras que Rusia proveería alimentos y tecnología de cohetes a un país que, como Corea del Norte, enfatiza el desarrollo de sus capacidades nucleares como medio casi exclusivo de defensa.

Para una mejor comprensión de las implicancias de esta cumbre ruso-norcoreana se entrevistó al analista geopolítico Leandro Ocón, quien plantea que el acercamiento Putin-Kim es natural debido a los vínculos geográficos e históricos entre ambos países, pero también entendiendo que tanto Rusia, Ucrania y Occidente visualizan la guerra en curso como un conflicto de largo plazo.

En tanto que estos entendimientos entre Moscú y Pyongyang son equiparables a los existentes entre Ucrania y la OTAN, e incluso deben ser mirados desde una perspectiva geográfica determinada, como respuesta a los acuerdos de defensa entre Estados Unidos, Corea del Sur y Japón. Por tanto, es una reunión que tendrá repercusiones tanto desde el frente ucraniano como desde el cada vez más activo frente del Pacífico.

Por último, desde el programa se analizaron las primeras sentencias a los acusados por el intento del golpe de Estado en Brasil durante el 8 de enero pasado, en una causa que involucra a 1390 imputados y que comporta mensajes políticos concretos hacia el bolsonarismo  duro y hacia su líder, el ex presidente Jair Bolsonaro.

En este sentido, ambos conductores abordaron el papel preponderante del Poder Judicial en la política brasileña, sobre todo desde el impeachment a la ex presidenta Dilma Rousseff en 2016, y la figura excluyente de Alexandre de Moraes, así como también las implicancias políticas de este megaproceso para los sectores políticos afiliados al bolsonarismo y para el propio presidente, Luiz Inacio Lula Da Silva.