La clave del éxito del gobierno de Evo Morales en Bolivia tiene un secreto, por lo que el propio ex vicepresidente Álvaro García Linera explicó que se trata de la implementación del Crédito Directo.

«Se ha realizado una fusión del capital financiero con el capital productivo, mediante la obligatoriedad de la banca privada para destinar el 60% de su dinero a la inversión productiva y construcción», explicó el ex funcionario.

Y siguió: «De igual manera, se determinó que el 50% de las ganancias de la banca privada se destinara al Estado. Como este dinero regresa a la sociedad y eso dinamiza la economía, eso nuevamente, luego, regresa a la banca… y lo que los bancos perdieron con una mano, al final, recuperan con la otra».