Declaración del FdeT Inta sobre los precios de los alimentos

Los precios de los alimentos, y entre ellos los de la carne bovina, han aumentado a límites intolerables para trabajadoras y trabajadores y el pueblo en general, amenazando la calidad de vida, el poder de compra del salario y la soberanía alimentaria.

El FdT INTA ve con extrema preocupación la situación y condena las maniobras especulativas de las oligarquías formadoras de precios que buscan aumentar sus ganancias a costa de las mesa de todos los días del pueblo trabajador, con el fin de lograr saldos exportadores en lugar de invertir para lograr una mayor producción.

Las empresas agroexportadoras, agroindustriales y las entidades ruralistas de los grandes productores han saboteado en toda la línea y desde el inicio la política del Gobierno popular del FdT. Unos aduciendo que el Estado les coarta la «libertad de empresa», y otros que las retenciones son descargadas sobre ellos y que junto a los impuestos les reducen casi a cero los márgenes de rentabilidad.

Las entidades de la mesa de enlace encomian al régimen que tiene como víctimas a quienes ellos dicen representar. Las retenciones a las exportaciones son una contribución que debe hacer la empresa que realiza la actividad exportadora, transnacionales que les trasladan la totalidad de los costos al productor, descontandoselo del precio al que le compran los granos. Hasta se apropian indebidamente de lo que le corresponde al productor, ya que descuentan en el pago por la compra de la materia prima la alícuota más alta, que es la que corresponde a la exportación del grano no procesado.

Pero los exportadores lo transforman en harina o aceite, que pagan una alícuota más baja que la que ellos le habían descontado al productor. Se calcula que aproximadamente el 20% de lo que se les descuenta a todos los productores del país en concepto de traslación de costos impositivos, no va al fisco, sino que se lo apropian las exportadoras. A pesar de esto, la mesa de enlace nada dice, y solo se dedica a hablar mal del Estado.

Tenemos discrepancias importantes con algunas medidas (o falta de medidas) del Gobierno Nacional y del Ministerio de Agricultura; marcha atrás sobre la expropiación de Vicentin y en el cierre de las exportaciones de maíz, en la falta de control sobre los embarques en los puertos, etc. Sin embargo, tenemos en claro que a quienes nos enfrentamos, son los mismos enemigos del pueblo de siempre: la vieja y nueva oligarquía, las agroexportadoras, la Sociedad Rural y sus hijos actuales, la mesa de enlace y sus socios.

Por eso proponemos:

-Recreación de la Junta Nacional de Granos o de otra estructura en que el Estado controle el comercio exterior agropecuario.

-Expropiación y estatización de Vicentin para que se convierta en una empresa de referencia en agroindustrias nacionales, apelando a sus trabajadores y técnicos.

-Creación de una empresa de concentración y distribución de alimentos que se abastezca de pequeños y medianos productores.

-Activa participación del INTA y otras entidades agropecuarias para asesorar a productores Pymes y familiares en lograr una producción incrementada y sustentable. Inclusión de pequeños productores y productores familiares en el Concejo Directivo del INTA.

-Control efectivo de los embarques en los puertos para terminar con las exportaciones no declaradas de commodities.

-Control popular de precios a todos los niveles.