Dos personas fueron detenidas sospechadas de practicar abortos clandestinos en un consultorio médico y ahora son investigados por la justicia. Este jueves la Policía de Investigaciones realizó un allanamiento en el inmueble de Mitre al 1200 donde secuestraron material relacionado con estas prácticas. Un médico de 83 años y una mujer de 59, que en principio dijo ser médica pero luego se retractó, serán imputados por el delito de aborto, que prevé una pena de 1 a 4 años de prisión, pero se agrava si quien lo realiza es profesional de la salud.
El fiscal Anibal Vescovo brindó detalles sobre el procedimiento, en una conferencia de prensa. “Es una investigacion que se remonta a un mes y medio atrás, a partir de un aviso anónimo de una persona que no quiso brindar datos”, detalló.
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Vescovo explicó que luego del llamado anónimo “se concretó la investigación en cuanto a interveción teléfonica y a partir de ese dato rastreamos el domicilio exacto donde se hacían estas prácticas y se hizo el seguimiento a través de contrainteligencia”.
De esta manera se realizó la interveción de las líneas de teléfono y “se comenzó con escuchas normales que tienen un delay, por lo cual nos enteramos de los hechos cuando ya habían ocurrido, o que estaban preparándose. A partir de eso se solicitó, como se hace en casos graves o de urgencia, que se realicen escuchas directas, es decir, mientras ocurre la conversación”.
A través del seguimiento de las escuchas, el fiscal detalló que “antes de ayer se dieron una serie de llamados en los cuales se estaban concertando citas, por lo cual solicité órdenes de allanamiento y se realizaron ayer”, momento en el cual se produjeron las detenciones.
En relación a la cantidad de prácticas realizadas por la pareja, el fiscal indicó que “no pudimos precisarlo, porque en principio la escucha era en diferido y no abarcaron el mes y medio de investigación, sino que fueron más recientes. A partir que vimos que se daban las llamadas, aunque algunos se frustraban porque la persona que llamaba luego decía que no iba a ir o postergaba el turno”, hasta que finalmente lograron concretar el procedimiento.
“Las dos personas detenidas tienen participación directa en los hechos”, pero aclaró que “es una investigación que recién está iniciando”, indicó el fiscal, por lo que remarcó que “hay medidas en reserva”.
“No está establecido desde cuándo se realizan estas prácticas, pero si funcionaba una clínica porque una de las personas detenidas es médico, aunque por lo que se investigó hasta el momento hace presumir que desde hace bastante tiempo atrás”, dijo Vescovo.
Como ocurre generalmente en estos casos, “las condiciones de higiene eran malas, no las que corresponden a un consultorio médico”, explicó el fiscal, y agregó que “se notaba descuido en cuanto a la manutención y al resguardo de los elementos sanitarios, la disposición, el lugar en sí es parte de una casa de familia”.
“En la puerta del domicilio hay una placa que indica que es un consultorio médico. Una de las personas aprehendidas es médico, aunque la mujer también había manifestado serlo, pero después se desdijo”, explicó el fiscal en relación a la profesión de los detenidos y el lugar en el cual se realizaban las interrupciones de embarazo.
Por otra parte señaló que en el momento dcel allanamiento “había una pareja que había concertado una cita para hacerse una práctica y son testigos en la causa”.
Los dos detenidos serán imputados por el delito de aborto, por le cual prevé una pena de 1 a 4 años de prisión si la práctica fue consentida por la gestante, y se eleva si es practicado por un profesional.
La mujer detenida poseía un sello con su nombre en el cual figuraba como médica y un número de matrícula, aunque luego se retractó ante la justicia, lo cual configuraría otro delito, además del aborto.
La audiencia imputativa se realizará entre la tarde de este viernes y la mañana del sábado, aunque aún no fue confirmado el horario, pero el fiscal aclaró que “no tengo pensado pedir prisión domiciliaria para los detenidos”.
