Por David Narciso

El ataque ocurrió el 21 de marzo de 2017 en el kilómetro 7 de la autopista Rosario-Santa Fe, cuando un automóvil se puso a la par de los dos móviles del Servicio Penitenciario (SP) y disparó a discreción con la intención de matar a “Pollo” Bassi, Facundo Muñoz y Milton Damario, quienes eran trasladados a la cárcel de Coronda después de asistir a una audiencia en tribunales. Resultaron heridos los prefectos Marcos Andriani y Oscar Gómez, Muñoz y el pasajero de un colectivo que circulaba por la mano contraria.

Según  el fiscal Miguel Moreno la investigación tuvo “mucho movimiento en los momentos posteriores al ataque” pero marcó un cambio cuando un perito informático y un personal dedicado al análisis de escuchas fueron transferidos al Organismo de Investigaciones. “Si bien ellos aún colaboran no lo estamos llevando a la velocidad que se quisiera porque estas personas tienen otro trabajo además de investigar para Homicidios”, lamentó Moreno.

Conclusión preguntó sobre las condiciones para investigaciones que requieren análisis criminal: “Nos están dotando de recursos tecnológicos; seguimos atrás con los recursos humanos que acompañan a estos recursos tecnológicos. Sin duda que avanzamos, pero quizá en las investigaciones todavía no se refleja porque por ejemplo estas dos personas que estaban específicamente afectadas para Homicidios, ya no dependen más de esta unidad, pero tampoco fueron reemplazados”, insistió el fiscal.

Las claves de la investigación son las siguientes:

-El testimonio de los efectivos del SP atacados no aportó mucho. Se trasladan en furgonetas de escasa visibilidad exterior por razones de seguridad.

-El seguimiento de cámaras de seguridad, desde Tribunales hasta la escena del ataque, permitió a la fiscalía determinar una hipótesis inicial de dos autos que habrían hecho el seguimiento del convoy, al menos desde que éste ingresa a la Avenida de la Costa.

-Al menos uno de esos autos aparece en la Avenida de la Costa y en la zona del puente Rosario-Victoria. Sin embargo las características no coinciden con las que describieron los penitenciarios. Esto permite deducir que hubo distintos autos en la etapa de persecución y en la ejecución del ataque.

-Tampoco coinciden con las características de un vehículo que pasa a alta velocidad por la ruta 34S (desde Baigorria con sentido a Ibarlucea) momentos después del ataque y que fue registrado por la cámara de seguridad de una empresa.

-Ese auto sí coincide con el que apareció incendiado entre Ibarlucea y Funes, con “material balístico” en su interior.

-La fiscalía está convencida que fue el vehículo utilizado en el ataque. Si bien no recolectaron vainas servidas ni hay armas para peritar, el material balístico hallado en el interior es de alto calibre coincidente con los rastros que quedaron en la autopista y las camionetas del SP.

-El trabajo fino que no se pudo completar por déficit de personal es el análisis y vinculación de los celulares que impactaron en las antenas ubicadas en el trayecto desde Tribunales en adelante.

-Por las características del hecho la fiscalía supone que se puede hablar de autores materiales e intelectuales. En ese caso las comunicaciones telefónicas permitirían atar los cabos hasta llegar a estos últimos.