por Florencia Vizzi
Luego de los sucesos de anoche, en que resultó gravemente herida Elizabet Cantero, el conflicto en la Unidad Penal para Mujeres, N° 5 estalló y derivó en motín. Prendieron fuego a algunos colchones, que fue rápidamente controlado, pero el amotinamiento continúa.
Fuentes del ámbito penal confiaron a Conclusión que las reclusas exigen la presencia del fiscal Marcelo Maximino, de un juez turno y la renuncia de la directora Susana Romano.
Las fuentes a la que accedió este medio manifestaron categóricamente que la situación del penal es insostenible, “una bomba de tiempo” señalaron, y agregaron que “la directora, Susana Romano no está apta para ocupar este cargo” y exigen que sea separada del mismo.
Las exigencias de las internas hacen eje en las pésimas condiciones del penal para alojar a una criatura y epiden que tanto la madre como la niña, y otra interna que se encuentra embarazada, sean trasladadas a un lugar mejor, o que se les otorgue la prisión domiciliaria.
Además revelaron: “tapamos las cámaras y pusimos los colchones en las puertas, y si no hay respuestas vamos a hacer lo que haya que hacer”, y señalaron que “mientras las directora del penal dice que no pasa nada, aquí están los guardias del servicio penitenciario en los techos con itakas, amenazándonos»
Las fuentes indicaron además que anoche toda la planta baja pasó cinco horas en reclusión, a raíz de la reyerta con Elizabeth Cantero. “Nosotras lo único que hicimos fue defender a la nena, que es un poco hija de todos, ella nació acá, y esa chica quiso estrangularla y las guardicárceles no hicieron nada, se quedaron mirando”.
Las internas manifiestan que el maltrato es permanente, que la reclusa que se encuentra embarazada no recibe la atención necesaria, y la alimentación que recibe tanto ella como la niña es un desastre.
El origen del conflicto
Todo comenzó en las primeras horas de la noche de ayer, cuando las internas se encontraban comiendo, y la pequeña F. de tan sólo 8 meses de edad, se encontraba en el coche, en el patio de la planta baja del penal, que es el sector para las detenidas con buena conducta, las madres con niños menores de cuatro años y las mujeres embarazada.
Tal como informaron las fuentes del ámbito penal a este medio, Elizabet Cantero fue a buscar su ración de comida, y al pasar por dónde estaba la niña, la sacó del coche y la atacó, por el cuello intentando estrangularla. Eso provocó la reacción de las internas de la planta, que la cercaron hasta que lograron que soltara a la niña.
«Las guardicárceles no hicieron absolutamente nada, se quedaron mirando, nosotras sólo le sacamos a la nena de las manos, pero eso es todo, no la golpeamos», revelaron las internas.
Cantero fue trasladada en grave estado al Hospital Centenario, dónde ingresó fallecida por un paro cardiorespiratorio, y logaron revivirla, aunque se encuentra en grave estado.
Entre tanto, las internas fueron puestas en reclusión casi toda la noche, y al amanecer, el conflicto fue tomando otras dimensiones.
Las reclusas reclaman contra la directora del penal, a quien califican de «verdugo», y solicitan la presencia de algún juez de turno, del fiscal Marcelo Maximino y que cesen los malos tratos a los que son sometidas por parte de la titular del penal.
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