Por Alejandra Ojeda (Enviada especial a Rufino) – Fotos: Florencia Vizzi (Enviada especial a Rufino)
Ropa ensangrentada fue encontrada en la casa del adolescente que confesó haber asesinado y enterrado a su novia de 14 años en su casa de la localidad santafesina de Rufino, y se sospecha que pertenecería a su padrastro. Desde la fiscalía, le confirmaron a Conclusión que en las próximas horas se tomarán declaraciones y mañana realizarán una audiencia imputativa de los mayores en la sede de la Unidad Fiscal de Rufino.
El hallazgo de la vestimenta se concretó en allanamientos realizados en la casa del adolescente y fue confirmado por el fiscal general de Venado Tuerto, Alejandro Sinópoli, quien sostuvo además que los investigadores sospechan que el chico, que se llama Manuel y tiene 16 años, no actuó sólo en el crimen.
«Se encontraron elementos muy importantes que vinculan a uno de los mayores detenidos y que tiene que ver con ropa con sangre», sostuvo el fiscal Mauricio Clavero.
Sinópoli indicó que el hallazgo, que se conoció después de una conferencia de prensa en la que se había señalado desde la fiscalía a cargo que por el momento no había elementos para inculpar a los parientes del adolescente detenido por el crimen de la joven Chiara Páez, se produjo en el cuarto del padrastro del chico.
No obstante resta corroborar si la sangre pertenecía a Chiara y si las ropas efectivamente eran del hombre que se encontraba detenido junto con la madre del adolescente y los abuelos maternos.
El fiscal admitió que durante la reconstrucción del hecho, el adolescente actuó en todo momento para demostrar que era el único autor del crimen, hasta el punto de volver a cavar un pozo similar al empleado para depositar el cadáver de su novia.
No obstante, Sinópoli mantuvo sus dudas con respecto a esa circunstancia. «Tras la conferencia de prensa de ayer, se encontraron elementos muy importantes que vinculan a uno de los mayores detenidos que tiene que ver con ropa con sangre. Manuel (el novio de Chiara) actuó junto a otra persona», expresó.
Las principales dudas pasan por la contextura del adolescente detenido, bastante menor a la de la adolescente asesinada, que tenía 1,75 metro de altura.
Desde la fiscalía, informaron que además del menor de 16 años que confesó ser el autor del homicidio –y que está a disposición de la Justicia de Menores de Venado Tuerto–, hay otras cuatro personas detenidas: la madre del joven; un hombre que sería la pareja de esta mujer; el abuelo y la abuela maternos del adolescente.
«Solicité una nueva prórroga de la detención de los cuatro mayores de edad, y dada la gravedad del caso, pedí lo que se denomina duplicidad de términos, es decir, que la detención sea por el doble de tiempo», detalló Clavero. Y agregó: «También solicité realizar la audiencia imputativa de los mayores el próximo jueves».
Celeridad
El fiscal del MPA valoró el trabajo realizado para hallar el cuerpo de la menor, y sostuvo que «en sólo 15 horas encontramos un cadáver que estaba enterrado a casi un metro bajo tierra en una vivienda particular y disimulado con chatarra de un taller de herrería». En tal sentido, detalló: «La denuncia de búsqueda de paradero fue hecha por los padres de la menor en la comisaría de Rufino el domingo a las 4.20 de la madrugada, mientras que –según la autopsia– la menor fue asesinada entre la 1 y las 4 de la madrugada de ese domingo. Estos datos confirman que nos movimos rápida y coordinamente con personal policial no sólo de Rufino, sino de localidades aledañas». Y finalizó: «Quiero también agradecer a la comunidad rufinense que estuvo desde un comienzo realizando las tareas de rastrillaje junto a nosotros».
Reconstrucción
En cuanto a la reconstrucción del hecho, Clavero precisó que duró aproximadamente siete horas. Y añadió: «Pudimos corroborar algunas inconsistencias en lo que dijo el menor. En algunos puntos, su relato no tenía relación con los hechos objetivos de la realidad. Estas grietas entre lo dicho y los datos de la realidad son sobre lo que trabajaremos fuertemente en las próximas horas para lograr la imputación de los mayores».
En la conferencia brindada el martes, cuando todavía no se conocía el hallazgo de las prendas con rastros de sangre, Sinópóli consideró que el adolescente «falsea la verdad» y advirtió que en la investigación se debe determinar «si está ocultando a otros participes».
Ayer, Conclusión dialogó con Hernán García, Director de FM 1 de Rufino, quien relató que el padre biológico del joven tuvo una participación cuestionable, ya que al ser “encontrado el celular de la joven por un grupo de voluntarios que intentaba dar con el paradero de Chiara, dieron parte a la policía que se constituyó en el lugar con perros de la división rastros».
Enterado de esto, el padre del agresor, se dirigió a la casa en la que habitaba el joven con su madre y el padrastro y lo sacó de la vivienda llevándolo a otro sitio. Este dato, hace dudar de cual fueron realmente las intenciones del padre biológico del menor que declaró haber sido el responsable de la muerte de Chiara.
Chiara, quien se encontraba embarazada, había desaparecido la madrugada del domingo último, cuando visitaba a unas amigas, y su cuerpo fue encontrado enterrado a última hora de la noche del mismo día, en la casa de su novio.
Poco antes, el menor había sido entregado por su padre, que es policía, y confesó la autoría del crimen.
