Este domingo un hombre de 38 años fue detenido en Villa Gobernador Gálvez acusado de ser el autor de los disparos que pusieron fin a la vida de Marcos Guenchul, el personal trainer  ultimado el pasado 23 de julio cuando salía de trabajar en un gimnasio ubicado en barrio Echesortu. Por el crimen,  ya estaba detenido Caio Santiago S., quien manejaba el auto del que se bajó el tirador. 

Según especificó el fiscal Adrián Spelta, a cargo de la causa, Maximiliano P. sería quien desciende del Peugeot 208 para, de alguna manera, «coaccionar» a Marcos Guenchul «para que deje de presionar a su ex pareja en cuanto al régimen de visitas de la hija». «Pero, en un forcejeo  esta persona realiza los dos disparos que le ocasionan la muerte a Marcos».

Spelta explicó que esta versión surge de las declaraciones de Caio Santiago S. quien relató que «esta persona se le aparece para darle una ayuda, que sabía del conflicto que ellos tenían, él y su pareja Priscilla, que él lo iba a ayudar».

En la versión de Caio S., esto no ocurrió de un día para el otro. «Lo que nos manifestó -señaló Spelta- es que esto se fue dando durante varios días hasta que ese día le dijo «hoy vamos a ir a hablar», lo pasó a buscar por su casa y fueron al lugar del hecho».

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El fiscal enfatizó que lo expuesto surge del relato del S. «Lo que nosotros tenemos, por el momento y según su versión, es que no fueron a matarlo, sino que buscaban intimidarlo para que dejen de presionar judicialmente por las visitas a su hija».

En relación a la ex pareja de Guenchul y su posible participación en el crimen Spelta explicó: «Lo que estamos tratando de dilucidar ahora es cuantas personas más están implicadas. Por ahora no tenemos elementos que indiquen que su pareja estaba implicada. A simple vista parecería que ella pudo haber participado, no del homicidio, porque no era el objetivo principal bajarse del vehículo e ir a matarlo, sino que era coaccionarlo para que deje de hacer lo que estaba haciendo. Después el resultado es el de la muerte, pero eso es materia del juicio y se evaluará el aspecto subjetivo de la conducta».

En ese sentido el fiscal aclaró que «en el teléfono de Priscilla no hay nada, porque ese teléfono lo había empezado a usar unos días atrás». Y añadió: «Estamos trabajando en el teléfono de Caio S. Él tenía un Iphone y como no hemos podido acceder a la clave, lo hemos enviado a San Pablo, donde fue peritado y en breve vamos a recibir el contenido del teléfono».

«Como partícipe, Priscilla puede ser en cierta manera sospechosa, o por lo menos hay cierta duda sobre cual fue su participación en todo esto, no nos es ajeno que ella se vio beneficiada con esta situación».

Spelta agregó que la persona detenida hoy no tiene antecedentes violentos y que en el lugar de la detención encontraron proyectiles y vainas coincidentes con el arma utilizada en el crimen de Guenchul pero que hay que esperar los resultados de los peritajes».