Dos hombres fueron condenados este miércoles en Rosario a 18 y 19 años de prisión por asesinar a balazos en 2016 a Matías «Cuatrerito» Franchetti, quien había cumplido con una sentencia por tráfico drogas en el caso «Carbón Blanco» y aspiraba a ser jefe de la barrabrava de Newell’s Old Boys, informaron fuentes judiciales.

Las penas impuestas por el Tribunal de Primera Instancia rosarino, integrado por las juezas Paula Álvarez, Patricia Bilotta y Mónica Lamperti, recayeron sobre Brian Ezequiel Gruning (25) y Leandro Agustín Altamirano (34), hallados culpables del delito de «homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego en calidad de coautor».

Según las fuentes, el segundo de ellos recibió la pena más alta ya que también se lo consideró autor de «portación ilegítima de arma de guerra».

La Fiscal de la Unidad de Homicidios Dolosos, Marisol Fabbro, había pedido 24 años de prisión para Altamirano, el changarín acusado de disparar contra Franchetti, y 20 para Gruning, un pintor de obra considerado cómplice del asesinato.

A Franchetti (23) lo mataron a balazos el 7 de junio de 2016, en la puerta del club Newell’s, en el Parque Independencia del centro de Rosario, y según la investigación el crimen estuvo relacionado con su intento por quedarse con la conducción de la barra.

De acuerdo a los pesquisas, quien disparó en al menos 14 veces fue Altamirano, mientras su cómplice conducía la motocicleta desde la que fue atacada la víctima.

Dos policías de civil que estaban en el lugar alertaron al Comando Radioeléctrico y a unas diez cuadras de la escena del crimen fueron detenidos los dos sospechosos con el arma presuntamente empleada para el homicidio.

Si bien la principal hipótesis de la investigación fue que los acusados recibieron una paga para matar a Franchetti en medio de la disputa por la conducción de la barra «Leprosa», la fiscal no incluyó el agravante de la «promesa remuneratoria» en su imputación ante el tribunal.

Por su parte, Franchetti había cumplido una condena de tres años en Lisboa por tráfico de cocaína en la causa que en Argentina se conoció como «Carbón Blanco».

Ese expediente terminó con las condenas del abogado Carlos Salvatore y el empresario futbolístico santafesino Patricio Gorosito -ambos fallecidos- por el envío en 2012 de una tonelada de cocaína a Europa en barco, disimulada en tres embarques de carbón vegetal.

Antes de terminar su condena, «Cuatrerito» fue extraditado a Argentina en 2014 y luego quedó en libertad.