Los hechos de inseguridad no tienen fin en la ciudad. Una vez más, el club Valencia, ubicado en B. Seguí y Solís, fue blanco del vandalismo. En este caso, la institución deportiva de zona suroeste sufrió el robo de todo el cableado de la cancha de 11, así como la rotura de los reflectores y la destrucción del tejido.

“Sucedió el miércoles por la madrugada. Robaron todo el cableado de la cancha de 11 que habíamos puesto recientemente, nos rompieron los reflectores, nos tiraron el tejido. Tanto sacrificio que estamos haciendo para levantar los paredones, y tener a los chicos adentro del club, vienen estos tipos que no sabemos quiénes son y te roban todo. Ya no sabemos qué más hacer”, lamentó Claudio Navarro, presidente del club.

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En el Valencia practican chicos desde los 5 años hasta adultos y mujeres, que participan de la liga Nafir. “En infantil tenemos casi 200 chicos y femenino también 100 y pico. El sábado queríamos hacer una jornada por el Día de las Infancias, una chocolatada, algo, y en lugar de eso vamos a tener que decirles a los chicos que no pueden venir a entrenar más de noche porque nos robaron todo. Ahora no tenemos nada. Tenemos que empezar todo de nuevo”, expresó indignado.

Luego recordó que “en su momento gastamos 300 mil pesos para cerrar el club, que era un montón de plata, y nos tiraron todo el tapial abajo, un desastre. Ahora un grupo de papás estamos haciendo las paredes de hormigón, pero vimos que ya nos rompieron algunas. Ya no sabemos qué hacer. Nos cansamos de hacer denuncias y nunca pasa nada”.

“Si no es por el propio sacrificio de los padres y los que estamos en el club sería zona de nadie, y los pibes estarían todos en la calle, drogándose.  La contención que hacemos nosotros no la hace nadie y no tenemos ayuda de nadie”, finalizó preocupado.