Una historia digna de una serie. Esta mañana la vocera de la Agencia de Investigación Criminal, María Sol Sala, brindó una conferencia de prensa para dar detalles escabrosos sobre un hecho de inseguridad que dio un giro tan inesperado como alarmante. «El hecho de robo está descartado», y descubrieron «en su teléfono celular que se postulaba para delegado del gremio gastronómico» motivo por el cual se habría producido el ataque de 14 balazos y además hallaron datos que indicaban que el mozo «planeaba a través de la contratación de un tercero atentar contra la vida de sus empleadores».
El pasado 24 de octubre una noticia daba cuenta de un hecho de inseguridad en la zona sur de la ciudad. Es que el mozo del conocido restaurante «Viejo Balcón» había sido atacado por presuntos ladrones que le efectuaron catorce balazos en un intento de robo de su auto cuando llegaba de trabajar a las 2.30 de la madrugada. Desde un principio los investigadores siguieron dos hipótesis, la del robo del auto y por otro lado una tentativa de homicidio.
El avance de la investigación dio un giro inesperado y todo indica que el ataque se habría producido «por una interna sindical», pero ese no es el dato más impactante, sino que los investigadores hallaron en el celular de la víctima datos que lo vincularon directamente con un «plan para atentar contra su jefa». Con estos elementos, los investigadores descartan de plano la hipótesis del robo.
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La vocera de la AIC, indicó que «en principio la Fiscalía solicita que se recaben testimonios de personas allegadas a la víctima y de allí se desprende que estaba postulado como delegado del gremio gastronómicos junto a un compañero», en ese sentido «se solicitaron los secuestros de los aparatos celulares y una vez intervenidos los teléfonos se pudo dilucidar que estas personas estaban planificando un ataque a sus empleadores a través de la contratación de terceros».
Con estos elementos, los investigadores descartan de plano el intento de robo, y si bien los pormenores de la motivación del ataque aun son materia de investigación, si se pudo saber que «el sicario contratado por la presunta víctima pertenecería a la barra brava de un club importante de la ciudad».
Es importante señalar que, en principio, los hechos no estarían vinculados, ya que por un lado existe «el ataque al mozo del Viejo Balcón que estaría motivado en una interna sindical por su postulación a delegado en el gremio gastronómico» y por otro lado la presunta «planificación del ataque a los dueños del restaurante con la contratación de un sicario».
A partir de los nuevos datos que arrojó la investigación, y si bien «hasta el momento no hay personas detenidas», la Fiscalía deberá determinar la situación procesal de quien se presumía víctima de un robo, Pero, en principio, ninguna figura del Código Penal encuadra en la conducta llevada adelante por el mozo.
Tras el momento del ataque, y con el caso de Joaquín Pérez, ocurrido cuatro días antes en barrio Arroyito, la indignación de los vecinos y familiares no tardó en expresar su malestar y pedir a los distintos gobiernos mayor seguridad en las calles de la ciudad.
Por otra parte, en ese momento desde el gremio gastronómico, repudiaron el hecho y pidieron el inmediato esclarecimiento del trabajador, que el jueves se presentaba a elecciones para refrendar su condición de delegado del personal de la empresa.
“Salía de trabajar y fue abordado por delincuentes. De milagro los disparos no afectaron órganos vitales y pudo salvar su vida. Ahora está internado en terapia con todos los cuidados del caso», indicó a Conclusión el secretario gremial de Uthgra Rosario, Sergio Ricupero.
«Miguel como toda la gente de la actividad gastronómica solo pretende vivir de su trabajo, en paz con su familia”, dijo Ricupero.
