El barrio Empalme Graneros es escenario de una gran conmoción tras hacerse pública una denuncia por abuso sexual dentro de la escuela Nº 1389, José Ortolani, ubicada en Génova y Cullen. Allí, una nena de 11 años, habría sido atacada en el baño de la escuela por otro chico, de 7º grado. Este lunes, padres y madres movilizaron a la puerta de la institución para exigir explicaciones y medidas urgentes a las autoridades.

«A mi hija me la violaron en la escuela», la desesperación puede palparse en la voz quebrada de Andrea, mamá de la pequeña ultrajada. Entre lágrimas, la mujer relató que el pasado martes, cuando la nena fue al baño durante un recreo, un chico más grande, presuntamente de 7º, se metió detrás de ella, le tapó la boca y la abusó sexualmente.

Según el desgarrador relato de la mujer, al principio la niña no dijo nada, pero tuvo un cambio de comportamiento tan notorio que se dio cuenta que algo estaba ocurriendo. «Me dijo que tenía dolor vaginal pero no quería hablar con nadie. Hasta que le contó a la madrina, solamente a ella».

«Ella quiso salir pero él la agarró de atrás y le tapó la boca. Y después no se animó a decirle a la maestra porque tenía mucho miedo. Seguro que la amenazó y por eso no dijo nada», detalló la mujer.

El jueves por la noche, cuando la niña pudo hablar y contar lo que le había pasado, la familia concurrió a la Comisaría de la Mujer donde hicieron la denuncia. A partir de allí, la menor comenzó a recibir tratamiento médico y psicológico, ya que no sólo padece un grave trauma que no le permite dormir ni hablar correctamente, sino que tiene una importante infección a raíz de las lesiones sufridas en los genitales. «No puede dormir de noche, la piscóloga me dijo que está como una nena de 5 o 6 años. Me acuesto con ella y se despierta a la noche gritando ¡soltame!», contó la mamá y agregó que tiene mucho miedo.

En la escuela

Luego de presentar la denuncia en la Comisaría de la Mujer, la familia de la víctima se presentó en la escuela y explicaron a los directivos lo que había ocurrido. «Acá no se dieron cuenta de nada. Cuando vine a hablar me dijeron que me iban a ayudar a investigar, pero que no haga marchas. Pero yo la marcha la tengo que hacer porque le arruinaron la vida a mi hija, tiene 11 años solamente».

En tanto el padre de la pequeña señaló que «no hay ninguna cámara de seguridad y acá no cuidan a nuestros hijos». «Fíjense que no han sido capaz de investigar o al menos de hacer una reunión el viernes urgente para explicar a los padres la situación. Nos largaron como animales de corral. Querían tapar todo».

En medio de un gran enojo y conmoción, este lunes por la mañana, padres y madres se concentraron en la puerta del colegio y se quejaron de la actitud de los directivos. «Están dando clases en forma normal y no avisaron nada de lo que pasó. Nunca le avisaron a las madres. Si no es porque estaban en el mismo grupo, nadie se enteraba», relató a Conclusión el papa de la pequeña abusada. «Acá no te cuida nadie, no hay una cámara, estamos todos desprotegidos…¿Por qué? porque somos todos gente de barrio, laburantes. Estamos exigiendo que cuiden a nuestros hijos, así como violaron a mi hija, mañana pueden violar a otra nena, y pasado mañana a otra».

Ante la creciente indignación de quienes estaban concentrados en las puertas de la escuela, la directora, fuertemente interpelada por ellos, trató de improvisar algunas explicaciones: «Hace años que estoy acá y siempre tuve puesta la camiseta de la escuela y siempre se cuidó a los chicos, siempre. La escuela es un lugar donde se detectan casos de violencia y nosotros somos los primeros en detectarlos y hacemos todo lo que es necesario para darle la calidad de atención que esos niños necesitan. Pero en esta situación nos vemos todos agobiados, no tan sólo ustedes como padres sino nosotros como docentes», manifestó Cecilia Siulo.

La mujer enfatizó que están tratando de proteger a la niña, que se hizo la denuncia y cumplieron todos los pasos que el protocolo exige, para que la nena no quede expuesta. «No estamos ocultando nada, todo lo contrario».

Por su parte, el delegado regional del Ministerio de Educación, Osvaldo Biagiotti, señaló que está interviniendo el Juzgado de Menores Nº 4 y la denuncia se presentó en la Comisaría de la Mujer. «Nosotros, desde el momento en que nos enteramos intervinimos en nuestro rol de Ministerio de Educación, acompañando a la familia de la niña, poniendo a disposición a todos los equipos y articulando con el Ministerio de Salud para que tenga toda la atención que necesita, y estamos aquí dando respuestas, yo estuve recién con los padres y madres que están aquí indignados».

En cuanto a los protocolos del Ministerio de Educación, Biagiotti explicó que se activó en el momento en que se enteraron lo que ocurrió, el protocolo indica que se le de intervención a la supervisora y a los integrantes de los equipos socioeducativos, se tomó contacto directo con la víctima y los adultos responsables y se dio intervención a la Justicia. Y nosotros ahora seguimos desde lo educativo, nosotros no llevamos adelante una investigación de tipo penal, sino que estamos tratando de acompañar a la niña y a su familia y también al equipo docente y educativo y habrá que deslindar si hay alguna responsabilidad administrativa que pudiera caber».