Tras el macabro hallazgo, otro dato desgarrador. El cuerpo que fue hallado el sábado pasado en la intersección de caminos rurales entre las localidades de Ibarlucea y Rodán fue identificado como Franco Ariel Hueso de 26 años y el informe preliminar de autopsia determinó que tenía un disparo en la nuca, las manos atadas en la espalda y una bolsa en la cabeza.
Según el informe preliminar de autopsia, el cuerpo del joven que fue hallado calcinado el sábado por la tarde cerca de la localidad de Roldán, da cuenta que presentaba un disparo de arma de fuego en la nuca, aunque el proyectil de le causó la muerte no fue hallado por los investigadores. Fuentes oficiales informaron que el joven tenía las manos atadas en la espalda y envueltas, al igual que la cabeza, en bolsas de nylon.
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La víctima fue identificada como Franco Ariel Hueso, de 26 años. Había salido de su casa de la localidad de Ibarlucea, el viernes pasado alrededor de las 18 para dirigirse a una entrevista laboral a la cual nunca llegó y nada mas se supo sobre su paradero hasta que fue hallada la moto en la que se desplazaba tirada en un zanjón.
A partir de allí comenzó la búsqueda, hasta que un trabajador rural se topó con el cuerpo, que estaba toralmente calcinado y tapado con una madera, en un camino rural de Roldán.
