La ex esposa de Alberto Nisman y jueza de San Isidro, Sandra Arroyo Salgado, destacó hoy que el fallo de la Cámara del Crimen que resolvió pasar al fuero federal la investigación de la muerte del ex fiscal sostiene que «existen razones más que plausibles para dar crédito a la hipótesis del homicidio».

Además, celebró que en la resolución los camaristas hayan puesto el acento en “las irregularidades que hubo a lo largo de la investigación” de la muerte del ex titular de la UFI-Amia, quien fue hallado muerto en su departamento de Puerto Madero el 18 de enero del año pasado.

«El fallo sostiene que existen razones más que plausibles para dar crédito a la hipótesis que venimos planteando desde la querella de que Alberto fue víctima de un homicidio, y que hubo intervención de terceras personas”, sostuvo Arroyo Salgado en declaraciones formuladas esta mañana a radio Mitre.

Destacó además que, en la fundamentación del voto, el camarista Mario Filozof fue “muy categórico” al afirmar que la fiscal que intervino en el caso, Viviana Fein, “trabajó en base a una postura preconcebida, focalizada sobre el suicidio”.

“Esto, obviamente, generó un estado de incertidumbre que se alejó del sentimiento de justicia porque toda actuación estaba marcada por esta postura preconstruida de la fiscal”, aseveró la ex esposa de Nisman.

En este contexto, dijo lamentar que “tuviera que pasar todo esto tiempo para que los jueces advirtieran esto que veníamos planteando desde fines febrero y marzo”.

“Debemos reconocer que, por fin, ha habido un reconocimiento de los jueces en relación a las graves irregularidades que hubo a lo largo de esta investigación”, sostuvo Arroyo Salgado en la entrevista.

Además, insistió con que, “desde el inicio, la justicia de instrucción era incompetente para intervenir en esta investigación” y fustigó el hecho de que sea la fuerza de seguridad que interviene en el momento de la denuncia del hecho la que determine qué fuero debe investigar.

“Lo preocupante es que en nuestro país esto funciona así en todos los casos. Es el cabo de la Policía Federal, el agente de Prefectura en este caso, o el gendarme el que decide a quién le hace la consulta. Esto ocurrió en el caso de Nisman”, indicó Arroyo Salgado.

“No sabemos si esto fue parte de lo que ocurre lamentablemente siempre, o si fue una acción deliberada”, reafirmó la ex esposa del entonces titular de la UFI Amia.

Por otro lado, puso el acento en la “incompetencia en los dos sentidos de la palabra” de quienes intervinieron hasta el momento en la investigación de la muerte de Nisman, en referencia a la jueza Fabiana Palmaghini y la fiscal Viviana Fein.

En este sentido, afirmó que no sólo eran “incompetentes” porque “no correspondía” que la causa tramitara en un fuero común sino también por “la falta de idoneidad” que, a su criterio, exhibieron a lo largo de la actuación.

“Nadie protegió esta investigación ni los elementos esenciales que debían ser secuestrados y peritados”, dijo Arroyo Salgado.