centro de justicia penal

Café de la Flor: absolvieron al funcionario municipal encargado de la inspección del bar

Se trata de Pablo Akerman, que revistaba en la Secretaria de Control y Convivencia Ciudadana y que había   certificado que estaba en condiciones de funcionar.
Café de la Flor: absolvieron al funcionario municipal encargado de la inspección del bar

 

Este lunes, en el Centro de Justicia Penal, el juez Juan Andrés Donnola absolvió a Pablo Andrés Akerman, uno de los imputados por la tragedia del Café de la Flor, a quien la fiscal Valeria Piazza Iglesias le había atribuído los delitos de de incumplimiento de los deberes de funcionario público en concurso real con falsificación ideológica de documento público en dos hechos en concurso real entre sí.

Pablo Akerman revistaba en la Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana y fue el funcionario que inspeccionó el Café de la Flor y certificó que se encontraba en condiciones de funcionar. Esa inspección tuvo lugar seis meses antes de la muerte de Adrián Rodríguez, bajista de Raras Bestias, quien falleció en octubre de 2015 víctima de una descarga eléctrica en pleno show en el escenario del bar.

Según las pericias realizadas por Ministerio Público de la Acusación, la Justicia llegó a la conclusión de que las instalaciones no estaban aptas para funcionar.

La fiscal Piazza Iglesias de la Unidad de Homicidios Culposos acusó a Akerman, que cumplía la función de verificador técnico de la Secretaria de Control y Convivencia Ciudadana de la Ciudad de Rosario, de omitir el control del cumplimiento de las condiciones de habilitación del local comercial Café de la Flor, ubicado en calle Mendoza al 800 de la Ciudad de Rosario y también de omitir dar aviso al Colegio de Ingenieros de Rosario para que realicen el control y aprobación del tablero eléctrico del local.

También se acusó a Akerman de insertar, en fecha 1 de abril de 2015 y 8 abril de 2015,  declaraciones falsas en los informes y en la posterior verificación, ambos instrumentos públicos de la Municipalidad de Rosario, confirmando que el local comercial se encontraba en condiciones para desarrollar su actividad, sin haber ido a la verificación el día 8 abril 2015 ni corroborar los puntos observados el 1 de abril de 2015.

Akerman era uno de los tres imputados por la tragedia ocurrida hace tres años.Los otros dos son el dueño del bar, Adrián Scharf, para quien pesa un pedido de 4 años de prisión efectiva y  10 de inhabilitación para actividades comerciales, y el electricista, Fernando Campodónico, a quien se le pidió 5 años de prisión efectiva y 10 años de inhabilitación para ejercer en su profesión. Se espera que esos juicios se lleven a cabo el próximo año.

 

 

banner canal de telegram diario conclusion