Por Marcelo Chibotta

Carolina Garrido tiene 10 años y es la niña que desde hace 30 días debió haber sido restituida a su padre después de haber tenido vacaciones con su mamá en Catamarca, según lo establecido por un acuerdo judicial entre sus progenitores.

Mientras su padre Sandro Garrido la busca infructuosamente en Catamarca, su abuelo materno, José Llompart, estuvo en Rosario y expuso su mirada sobre el caso en una entrevista exclusiva concedida a Conclusión.

En la misma exhibió copias, tanto de la partida de nacimiento de Carolina, como de un informe psicológico del servicio de guardia del Equipo Técnico Forense del Poder Judicial de Catamarca en donde se detallan los «Aspectos psicológicos» de la menor.

En el mismo, fechado el 7 de agosto, se expone que «Liza Carolina se muestra extrovertida y colaboradora durante la valoración, precisando con claridad los motivos de su presencia en sede judicial».

Seguidamente, el estudio indica: «Su actitud global a lo largo de la entrevista, así como lenguaje expresivo, evidencian pseudomadurez. En su relato, lo paterno surge polarizado, connotado como negativo».

«Señala su deseo de continuar viviendo con su madre y hermanos, relatando contar con vínculos familiares, espacios de socialización y grupo de amigos», finaliza la nota firmada por la psicóloga Julieta Figueroa.

Además, el abuelo de Carolina presentó una copia de denuncia por «Violencia familiar, maltrato físico y psicológico» contra el padre, por el cual solicita una medida cautelar de protección de persona.

A continuación, la entrevista:

¿Por qué no fue restituida Carolina según lo habían acordado judicialmente?

El allanamiento ha existido y yo diría que es antijurídico porque en primer lugar iba el juez de paz que fue enviado por la justicia de Catamarca con las dos abogadas defensoras de Sandro Garrido a buscarla a mi nieta.

En ese momento mi nieta no estaba y la madre tampoco. Yo hice llamar a la madre, que llegó a los pocos minutos sin la nena y dijo que la chica no se quería ir y que no la iba a entregar.

Las abogadas se presentaron con dos policías hombres, sin ninguna asistente social ni un sicólogo para resguardar el estado físico de la menor.

Estas abogadas no defienden a la menor, defienden al padre y yo defiendo a mi nieta. Mi hija es grande, el padre es grande y la chiquita es chica y es la única que acá está sufriendo, que se ve envuelta en todo esto es Carolina.

Fueron el martes con la orden del juzgado de familia de Catamarca, no encontraron a la chiquita y el jueves volvieron e hicieron otro allanamiento pero ya con un policía hombre y una mujer, pero nunca con un sicólogo y una asistente social como tiene que ser.

No se estaban llevando un objeto. Querían llevarse una chica, un ser humano. Ellos no resguardaron en ningún momento la integridad física de la nena.

Las abogadas tenían que quedar afuera pero han revisado bajo la cama, dentro del ropero, en todos lados ellas y el juez de paz también.

Ellos alegaban que en su condición de concejal podía influir en la comunidad de Chumbicha se han demorado y evitado allanamientos. ¿Qué nos dice de eso?

Yo nunca hago valer mi condición de concejal, soy el abuelo de la chiquita, el padre de mi hija y como tal voy a velar siempre por ellas. Hoy estoy de concejal, mañana no sé, es una circunstancia en la vida.

La policía no quería tomar cartas en el asunto porque no tenía orden del fiscal, después vinieron policías de Catamarca y se portaron bien porque Chumbicha es un pueblo de 8 a 10 mil habitantes y nos conocemos todos, me conocen a mí y lo conocen a ellos.

El padre de Sandro y sus hijos llegaron circunstancialmente a Chumbicha en 1981 con la empresa Víctor M. Contreras que hacía el gasoducto. Ahí se radicaron, después Sandro se puso de novio con mi hija que se quedó de encargue y ahí pasó todo.

En Rosario creo que vive la mamá de Sandro y su hermana Mónica, que según me dicen, Carolina vivía más con la hermana que con Sandro, entonces para qué la quiere él si va a vivir con otra gente.

Creo que tiene más sangre de la parte materna que de la otra parte, nosotros sabemos que somos los abuelos

Más allá de todo ello, no se cumplió la restitución de la nena a su padre, tal como se había acordado judicialmente…

Voy a volver más atrás. En el año 2013 acuerdan con la jueza de acá de Rosario, que se la tenían que restituir inmediatamente la chica a mi hija porque la mayor parte de su vida vivió en Chumbicha, no en Rosario.

El 6 de diciembre de ese año terminaban las clases y el 9 la tenían que llevar al hotel donde paraba mi hija para que Carolina vuelva a Chumbicha, y el padre no la llevó.

Apelaron e hicieron toda una tramoya y no la llevaron a la chiquita. Mi hija no la vio ahí y nosotros tampoco durante todo el año 2013 y allí empezó un peregrinar por los juzgados.

En abril de este año, la mamá de Carolina, mi hija Silvia, logró poderla ver en Rosario adonde vino con mi mujer y la chiquita dijo que ya no se quería quedar en Rosario el padre dijo que iba a hacer lo que la nena dijera, pero la llevó y no la trajo más.

¿Pero eso no estaba avalado por una decisión judicial tomada en Rosario?

Exacto. Pero cuando la jueza de Catamarca pide la restitución en abril de 2013, la justicia de acá no le dio bolilla.

Mi nieta ha nacido y fue criada en Chumbicha y fue anotada para cursar el tercer grado en el colegio privado de allí, pero no pudo ir porque el padre la trajo a Rosario.

Quiero decirle también que la mamá de Carolina solicitó documentación a la escuela Nº 115 Provincia de Salta, y allí le responden que la documentación de la nena estaba en poder de la directora que ella no estaba allí por problemas familiares. La documentación tendría que estar en la escuela porque si la directora no está, está la vice o la secretaria.

Entonces, allí el papá señaló que para pedir eso debían dirigirse al Juez y a los abogados para tratar el tema, ¿y sabe por qué?, porque la han inscripto sin ninguna documentación.

Pero volviendo a la pregunta original. ¿Por qué la nena no fue restituida tal como lo acordaron judicialmente?

Mi hija dijo que Carolina no quería estar con el padre y por eso la iba a resguardar ella, no quiere estar en Rosario ni con el padre ni con la tía. La nena quiere estar en Catamarca, por eso mi hija la resguarda en su función de madre.

Una vez lo escuché al doctor (Eugenio) Zaffaroni comentando que nadie roba lo que es de uno, entonces la madre no roba a la chica porque es de ella. Lo que yo no sé es si él será el padre.

Pero así como estuvo ese acuerdo también hubo otro por el cual que el padre la traía en diciembre y la devolvía en febrero

El padre dice que la nena está con él porque cuando vivía con su mamá estaba desnutrida, tenía piojos y era adicta a los dulces entre otras cosas….

Yo le puedo decir que son todas mentiras, la nena comía muchas veces en mi casa y mi señora tiene es slogan que dice que todo lo que vivimos, disfrutamos y comemos lo vamos a llevar, yo quisiera que vean como se come en mi casa. Yo no tengo auto pero en mi casa no falta nada.

¿Dónde vivía la nena en Chumbicha?

Estaba en la casa de mi hija e iba a mi casa. Chumbicha es un pueblo chico en donde los niños andan todo el día en la calle, no es como acá en Rosario.

Quién la mandaba cotidianamente a la escuela y demás?

La madre la mandaba siempre a la escuela y los fines de semana se quedaba en casa, iba a la tarde al colegio y acá la tiene la hermana de Sandro que no es ni arte ni parte casi de mi nieta, como somos nosotros.

¿Cuáles son los pasos que Ustedes piensan seguir?

En Catamarca seguiremos haciendo los pasos legales del caso. Enla Asesoría de Menores de Catamarca recibieron a la chiquita el jueves e hizo un escándalo porque no se quiere venir con el padre y nadie la ha estado obligando y al otro día le hicieron un test sicológico….

Mire, le voy a decir algo, si la nena se quiere venir a vivir con el padre yo le traigo a la chiquita porque quiero lo mejor para la chiquita. Si se siente bien con el padre, que esté con el padre, pero si se siente bien con la madre, que esté con la madre. Es así.

Yo pido que pongan a la nena en una Cámara Gessell y que ella diga lo que siente, y que la justicia que escucha a los grandes, debe escuchar a mi nieta. Acá defendemos al padre o a la madre, pero ¿quién se acuerda de la chiquita?

¿Qué está haciendo en Rosario?

He venido a ver a un abogado y ver como se puede seguir acá y para ver cómo está el expediente para así llevar algo a Catamarca.

La jueza de allá se declaró incompetente porque la chiquita estuvo acá los últimos dos años. Pero ¿cómo estuvo estos dos últimos años la chiquita? La mayor parte de su vida la vivió en Catamarca y para eso hicimos presentaciones para que allá en Catamarca también se tomen cartas en el asunto.

Si ve la partida de nacimiento de la chiquita, puede ver que es de allá y no de aquí, que vino a pasear y se quedó, o mejor dicho ‘la quedaron’ que es muy distinto.

Rosario escucha una sola campana y es la de ellos, pero ustedes escuchan las dos.

Pero tantas cosas que se dicen acá, que la tenemos secuestrada, que no comemos, que yo manejo la Justicia. Si yo manejara la Justicia como concejal, hoy estaría la nena allá.

Foto: Salvador Hamoui