Un deudor de alimentos no pudo salir del país porque los controles funcionan «a rajatabla». El director de Migraciones, Horacio García, aseguró que se cumplen «a rajatabla» las disposiciones de control del organismo y que cuentan con la información del registro de deudores de las obligaciones familiares, que es lo que permitió hace unos días impedir que un hombre que debía $200 mil de cuota alimentaria abordara un avión.

«Tenemos la información del registro de deudores de obligaciones familiares, por eso cuando una persona incumple, la Justicia es la que nos indica que no puede salir del país, así como también después -cuando se pone al día con sus obligaciones morosas- lo habilita», explicó el funcionario al canal TN.

Y agregó: «Cumplimos a rajatabla las disposiciones de Rogelio Frigerio (ministro de Interior), que pidió que agreguemos toda la tecnología para ser más eficientes en todos los puntos de salida del país. Eso hoy se cumple, estamos en red con todas las fronteras».

El 23 de febrero un hombre, de quien no trascendió la identidad, pasó junto a su mujer y sus dos hijas el check in de la aerolínea en el aeropuerto de Ezeiza y luego el control de Migraciones pero, cuando toda la familia se aprestaba a subir al avión rumbo a Nueva York, un oficial de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) le comunicó que no podía salir del país.

Diana Mezzano, abogada de la ex mujer del hombre oriundo de Córdoba, aseguró a TN que «la deuda ascendía a 195 mil pesos», ya que «hace un año y medio que no abonaba» lo establecido por la Justicia como cuota de alimentos de su hija mayor, fruto del matrimonio anterior.

Según la letrada, el denunciado «no decía por qué no podía pagarla, no daba ninguna excusa» y fue entonces cuando decidió pedir «a la Justicia de familia que lo incluyera en el registro de deudores alimentarios y le prohibiera salir del país».

Mezzano explicó además que este proceso judicial tuvo lugar en diciembre, pero como los oficios que se libran a Migraciones para evitar el paso por fronteras y a la PSA por los viajes aéreos no se comunican a la contraparte, el incumplidor se enteró recién cuando estaba por abordar el avión.

Ante la imposibilidad de viajar, el hombre se comunicó con la letrada de su ex mujer para intentar abonar lo adeudado, pero la letrada le explicó que, además de los 195 mil pesos que debía, tenía que demostrar que iba a cumplir con la cuota los meses siguientes.

En consecuencia, y después de perder seis días de sus vacaciones, el hombre depositó 326 mil pesos en concepto de la deuda existente, doce meses de cuota alimentaria por adelantado y los honorarios de la abogada de la ex mujer.

Este dinero se encuentra aún en la cuenta que dispuso el Tribunal de Familia para tal fin, por eso «tenemos que esperar a que la Justicia le gire la plata a mi clienta», finalizó Mezzano.