La tragedia ocurrida este miércoles por la tarde en Barrio Tiro Suizo cuando una bala se llevó la vida de Thiago Avaca, de tan solo 9 años de edad comienza a aclarar su trama. Si bien en principio una versión indicaba que se trataba de un crimen mafioso, la verdad fue aún más dolorosa. El disparo fue accidental y fue hecho por uno de sus amiguitos a quien se le escapó el tiro mientras, entre varios chicos, manipulaban un arma que habían encontrado en la casa donde el niño murió.
De acuerdo a las investigaciones llevadas adelante por el Ministerio Público de la Acusación, y los testimonios tomados en el lugar del hecho, en zona de Lamadrid al 1600, el arma estaba en la casa del niño y fue hallada por un amigo y los hermanos de Thiago.
Sin conciencia del peligro, los chicos manipularon y jugaron con el arma y, en medio del juego, ésta se disparó y la bala mortal impactó en la cabeza del niño. El chico ingresó al Hospital Roque Saénz Peña ya fallecido. Los médicos determinaron que tenía un solo disparo en el cráneo con orificios de entrada y salida.
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Así quedó descartada la primera versión que «indicada que una persona se introdujo por los techos disparando contra el menor», comunicaron desde Fiscalía. «Los exámenes preliminares médicos forenses dan cuenta de que el menor tiene un solo disparo en zona de cráneo corrigiendo la primer versión que hablaba de tres disparos que en un primer momento se tomo escoriaciones como heridas de arma de fuego. Fallece por un disparo en zona de cráneo».
La investigación sigue su curso porque el arma aún no fue encontrada y desde el MPA se le dio intervención al Juzgado de Menores.
