Violencia de género. María Noelia Santinello ingresó el miércoles pasado, alrededor de las 23, al Hospital de Emergencia Clemente Álvarez (Heca) con el 10% de su cuerpo quemado. Y lo llamativo del hecho es que quien realizó la denuncia y la llevó al hospital, fue su pareja, y el presunto agresor.
Recién esta mañana, casi dos días después, el principal sospechoso fue detenido por tentativa de homicidio agravado en contexto de violencia de género.
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En ese marco, familiares de la víctima, junto al apoyo de la ONG Ademur, denuncian la “falta de la mirada de género” en el abordaje y manejo del caso.
“Noelia no entró al Heca porque se cayó de una bici, entró prendida fuego. Y vino con su presunto femicida que dijo que tuvo un accidente y le creyeron al tipo, cuando tiene quemaduras en las manos”, se quejó indignada Fernanda Serna, referente de la ONG en diálogo con Conclusión.
En la misma línea, aseguró que Noelia ingresó al Heca y no dieron ningún informe a nadie de que había ingresado una mujer prendida fuego. “Nada estuvo bien de parte del Estado y obviamente que nos preocupaba la hija de Noelia porque si este tipo fue capaz de prender fuego a Noelia, cómo sabemos que no iba a hacerle daño también a la nena. A nadie le importó la seguridad de Glenda -hija de Noelia-”.
A pesar del enojo, Serna celebró que “por fin en un caso, en poco más de 24 horas, está detenido un tipo que intenta asesinar a una mujer, porque lamentablemente no pasa todos los días”.
Natalia Santinello, hermana de la víctima contó a Conclusión que Noelia está grave: “Tiene las vías respiratorias muy quemadas, está sedada y entubada y le están manteniendo la presión porque es muy baja. El pronóstico es todavía que corre riesgo de vida. Tiene quemaduras graves en la cara, en los brazos, en las manos, en el pecho y en una pierna”.
“Esto sucedió antes de anoche, alrededor de las 23. Si no me llamaban de la escuela de mi hermana avisándome, no sabía que mi hermana estaba acá internada”, relató.
Una vez que se enteró del trágico episodio, Natalia se comunicó con la pareja de Noelia -actual detenido– para saber qué había sucedido. “Me dijo que mi hermana había tenido un incidente menor, y que estaba siendo atendida. Pero mi hermana está con riesgo de vida, no es un incidente menor”, disparó y siguió: “Me dijo que yo era una caradura y que no me tenía que comunicarme con él. Una persona que no prende fuego a otra no me contesta de esa forma, porque si no escondes nada vas con la verdad. Vio a mi cuñada y a mi hijo acá en el Heca y salió corriendo”.
Afortunadamente, Natalia pudo recuperar a su sobrina de 11 años. “Me presenté a la comisaría, hice la denuncia y las chicas de la ONG me ayudaron, porque si le pasaba algo a mi sobrina quién me la devolvía”, se preguntó.
“¿A dónde está el Estado, la Justicia? Eso de ‘acompañamos a las víctimas’ es falso, porque no me sentí acompañada en ningún momento. Al contrario, me sentí desesperada”, manifestó conmovida recordando la difícil situación a la que se vio expuesta y resaltó que “mi hermana entró al Heca caratulada como accidente y ahí no se activa ningún protocolo de nada. Pero una chica que entra así quemada no es un accidente, menos a esta altura con todos los femicidios que hay”, manifestó.
Finalmente, Hugo Capacio referente de la Ong Atravesados por el femicidio, contó que el agresor es “un profesor, que escribe libros sobre violencia también. No hablamos de cualquier persona, sino de una persona que sabe lo que hace y cómo se hace. Si la Justicia investiga se va a dar cuenta con quién se puede encontrar. Él quería quedarse con mi sobrina”.
Mientras Noelia lucha por su vida, sus familiares bregan por Justicia, a la espera de que el próximo lunes, día en que será la audiencia imputativa, llegue una respuesta y un accionar favorable por parte del Estado.
