La pareja conformada por Evelyn Daiana Lencina, de 26 años, y Carlos Daniel Vicentín, de 42, quedó en prisión preventiva por 60 días en el marco de una investigación que encabeza el fiscal Juan Sebastián Marichal a raíz de la muerte ocurrida en Reconquista de uno de los hijos menor de edad de la mujer.

Se trata de Adrián Insaurralde, de 10 años, quien falleció el pasado 18 de febrero después de haber estado internado doce días en el hospital local luego de autoinfligirse una asfixia por ahorcamiento.

La medida cautelar fue ordenada por el juez de la Investigación Penal Preparatoria (IPP), Gustavo Gon, en función del acuerdo al que arribaron el fiscal y la Defensa de los dos imputados en una audiencia llevada a cabo el pasado sábado en los tribunales de Reconquosta.

Durante los 60 días, Marichal continuará la investigación y los otros tres menores –hermanos de la víctima– deberán ser entrevistados por especialistas en Cámara Gesell.

Delitos

Antes de definir la prisión preventiva de las dos personas investigadas, el fiscal Marichal realizó las imputaciones.

A Lencina, madre de la víctima víctima, le atribuyó dos hechos ilícitos: la autoría de abandono de persona doblemente agravado (por resultado de muerte y por haber sido cometido por la madre contra su hijo), en concurso ideal con privación ilegítima de la libertad doblemente agravada (por mediar violencia y amenazas y por haber sido cometido en la persona de un individuo a la que se le deba respeto particular); y la autoría del delito de impedimento de contacto de menores con su padre no conviviente agravado (por tener el niño menos de 10 años).

Por su parte, al hombre imputado le atribuyó la autoría de abandono de persona agravado (por resultado de muerte), en concurso ideal con privación ilegítima de la libertad doblemente agravada (por mediar violencia y amenazas y por haber sido cometido en la persona de un individuo que se le debe respeto particular).

Cuatro niños

En la audiencia, Marichal informó que “las víctimas son cuatro niños de entre 10 y 5 años. Tres de ellos son hijos de la mujer investigada y uno es hijo del hombre imputado”.

“Uno de los hijos de la mujer murió”, remarcó el fiscal. Asimismo, hizo hincapié en que “el niño ya venía manifestando un malestar recurrente por sus condiciones de vida y, en particular, porque quería ver a su padre biológico y la madre se lo impedía”.

Marichal profundizó en los sometimientos que sufrían el niño que perdió la vida, sus dos hermanos y su hermanastro. Indicó que “los menores eran abandonados a su suerte en la vivienda que compartían en el barrio Guadalupe de Reconquista».

El fiscal indicó además que “los dos imputados los amenazaban, los golpeaban, los dejaban encerrados en la casa por largos períodos de tiempo y a cargo de las tareas del hogar”. Asimismo agregó que “vivían en condiciones de mala salubridad y era habitual que no tuvieran comida suficiente”.

“Estas conductas delictivas pusieron en peligro la vida y la salud de los niños y se agravan ya que tanto la mujer como el hombre investigados detentaban una posición de garantes legales por ser los progenitores de sus respectivos hijos biológicos, y de progenitores afines respecto de los hijos biológicos de su pareja”, afirmó Marichal.

El funcionario del Ministerio Público de la Acusación (MPA) indicó que “los delitos fueron cometidos en reiteradas oportunidades desde –al menos– septiembre de 2019 y hasta el jueves 6 de febrero de este año”