Alrededor de las 22.30 del último 31 de diciembre, Ana María Altamirano transitaba con su moto por la ruta provincial 18, a la altura del kilómetro 1, cuando un Peugeot 408 blanco la embistió y la arrastró unos 200 metros. El conductor se dio a la fuga y Ana María, que resultó con graves lesiones, falleció poco después en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez. Este miércoles, el hombre que iba tras el volante fue imputado por la muerte de la mujer de 34 años y el juez Ismael Manfrín dictó para él prisión preventiva, de cumplimiento efectivo, por el plazo de ley.
La vuelta de tuerca que terminó con la detención del conductor se produjo el 1º de enero, cuando efectivos del Comando Radioeléctrico de Pérez encontraron el vehículo con el que la mujer fue atropellada dentro de un zanjón, a unos 500 metros del camino viejo a Soldini, al límite del municipio.
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El dueño del rodado había declarado que el mismo le había sido sustraído ese mismo 31 de diciembre, mientras visitaba a un pariente, en zona de Castellanos al 4000. Sin embargo, cuando se pidieron los informes correspondientes, se pudo verificar que la denuncia por robo fue realizada ese 1º de enero, después del siniestro.
Con esa nueva información, el pasado 3 de enero, el fiscal Marcelo Vienna ordenó la detención de Diego Hernán U., de 40 años quien, este miércoles, se quebró durante la audiencia imputativa y admitió haber estado tras el volante cuando se produjo el siniestro fatal.
Vienna le achacó al acusado haber conducido de forma imprudente, negligente y antirreglamentaria y le imputó el delito de homicidio culposo agravado por haberse dado a la fuga y no socorrer a la víctima y el juez Manfrín hizo lugar al requerimiento del fiscal y dictó la prisión preventiva por el plazo de ley.
