Luego de varias horas de demora por las demandas de los jefes de la banda de Los Monos, por el agravamiento de las condiciones de detención, en el nuevo Centro de Justicia Penal, inició un juicio sin precedentes en la Justicia provincial.

La jornada comenzó con la presentación de las partes. Por un lado las defensas de los veinticinco imputados, de los cuales catorce son policías de distintas fuerzas. Los letrados que representan a los acusados son Carlos Edwards, Fausto Yrure, Carlos Varela, Adrián Martinez, Corvalán, Quain, Navas, Rucci, Carbone, Tortajada, Larrubia, Martorano, Piercecchi, Ubiedo, Mazzuchini, Ruiz,
Ferrara, López y Chaumet. Le siguieron los fiscales, Gonzalo Fernández Bussy, Luis Schiappa Pietra, Alejandra Rodríguez, María Verónica Ballari y Osvaldo Moscetta.

El tribunal está integrado por el presidente Ismael Manfrín, Marisol Usandizaga y María Isabel Mas Varela.

Luego de varias horas de negociación con los imputados, lograron acordar que los mismos suban a la sala de audiencia y se dio inicio al debate.

La demora se generó porque un grupo de ocho, de los veinticinco, imputados como integrantes de la banda de Los Monos que serán juzgados a partir de hoy demoran el inicio del juicio en señal de protesta por las condiciones de detención durante el lapso de tiempo que demande el debate oral y público. Es que los ocho sindicados como jefes de la banda deberán permanecer en el subsuelo del nuevo Centro de Justicia Penal con condiciones que no son acordes, según indicaron sus abogados.

Según se pudo saber, los jefes de la banda, que pertenecen a la familia Cantero, se rehúsan a ingresar a la sala de audiencias hasta que el juez resuelva el recurso de habeas corpus presentado por los abogados, por el agravamiento de las condiciones de detención.

Fuentes judiciales informaron que el de recurso presentado por la defensa de los acusados plantea que los acusados “no pueden permanecer” en el sector destinado a los detenidos, ubicado en el nuevo Centro de Justicia Penal “porque es un espacio indigno para tal fin”.

Según trascendió, los líderes de la banda solicitaron que al término de cada jornada de audiencia “sean trasladados a las unidades penitenciarias donde deben estar alojados”. Pero será el juez que preside el debate quien tiene la potestad de resolver dicha situación.

En señal de protesta y para evitar subir a la sala de audiencias los ocho integrantes de la banda rompieron sus ropas.

De acuerdo a la información brindada por voceros de la justicia, la decisión del magistrado fue que permanezcan en el Centro de Justicia Penal y los detenidos se negaran a comparecer a la sala de audiencias, existe la posibilidad de que se los juzgue en ausencia.

El inicio del debate sigue retrasado a pesar que ya se encuentran en la sala de audiencias 17 de los 25 imputados, mucho de los cuales llegaron a esta instancia en libertad.

Juicio a Los Monos: quién es quién en el proceso que comienza este martes