Un escalofriante y sospechoso triple crimen tuvo lugar en Ibarlucea durante la madrugada del sábado, cuando un hombre fue asesinado junto a su bebé a la salida de un casamiento tras un ataque a balazos y pocas horas después, el vehículo con el que se trasladaban apareció prendido fuego y con un cadáver en su interior, presuntamente el de su mujer.

Al finalizar el evento en el salón privado Campos de Ibarlucea, una familia se disponía a regresar a su hogar cuando fue interceptado por una camioneta de la que salieron los disparos mortales, causando heridas mortales en un hombre de 33 años identificado como Maximiliano G. y su pequeña hija Elena de uno.

Ambas víctimas fueron trasladadas al hospital Eva Perón donde finalmente fallecieron, en tanto el auto en el que se trasladaban fue hallado en estado de calcinación y con un cuerpo sin vida en su interior, identificado como Vanesa R. de 37 años.

Las primeras investigaciones del conmocionante hecho para la región arrojaron que la familia regresaba en un Audi TT de color blanco por la ruta 34 con dirección a Rosario, cuando fue interceptada por una Amarok blanca con vidrios polarizados. Al detectar la maniobra, el hombre al volante intentó regresar al salón de fiesta pero recibió la ráfaga mortal donde encontraron nueve vainas servidas calibre 9 milímetros.

Tras el ataque, una de las personas que había participado del casamiento auxilió a las víctimas y las trasladó, también en una Amarok pero gris, al hospital más cercano. Este recorrido fue escoltado por el Audi TT ahora conducido por la mujer, se presume pareja de la víctima.

Después de esto la Policía encontró el auto incendiado en cercanías de calle Urquiza y un camino rural de Ibarlucea, aunque costó identificar el cadáver que se hallaba en su interior, ya que el cuerpo en cuestión se encontraba en total estado de carbonización.

Hipótesis

Los investigadores indicaron que la mujer fue hasta el hospital a bordo del Audi, pero tras recibir la confirmación de las muertes dejó el lugar, lo mismo que la persona que había llevado a los heridos.

Personal del centro de salud dio aviso a la Policía, que un rato más tarde encontró en un camino rural cercano a Ibarlucea el Audi quemado y con un cuerpo de mujer calcinado en el asiento del acompañante, que sería la pareja del hombre asesinado, indicaron fuentes de la pesquisa.

En el lugar del ataque personal de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) secuestró 9 vainas servidas de calibre 9 milímetros que fueron enviadas a peritar por orden del fiscal.

El hombre asesinado de varios disparos fue identificado por la Policía como Iván Maximiliano Giménez (33), mientras que la niña también alcanzada por las balas se llamaba Elena y tenía un año y medio.

El cuerpo de la mujer hallado calcinado en el Audi fue enviado al Instituto Médico Legal de Rosario (IML) para su identificación, pero voceros del caso indicaron que sería la pareja de la víctima, llamada Érica Vanesa Romero (37).

La madre de la mujer se presentó esta mañana en el Hospital «Eva Perón» y reconoció a Giménez y a su nieta, tras lo cual brindó la identidad de su hija, quien le había avisado que concurrirían a un evento en Ibarlucea, precisaron fuentes policiales.

El encargado del salón de fiestas contó a la Policía que el evento concluyó alrededor de las 4 de la mañana y, mientras se producía la desconcentración de los invitados, un grupo de personas regresó hacia el salón a los gritos, agregaron los informantes.

Cuando el hombre, sorprendido, preguntó qué ocurría, las personas que regresaron dijeron que «se escuchaban tiros a la altura del canal Ibarlucea», un pequeño arroyo ubicado cerca del lugar.

Según informaron fuentes de la investigación, no se descarta que el móvil del triple crimen esté relacionado con el narcotráfico, ya que una de las personas que se casó anoche cumple prisión domiciliaria por una causa relacionada con esa actividad, tramitada en la Justicia federal.

El fiscal Ávila ordenó al Gabinete Criminalístico el relevamiento de la escena del hecho, realizar pericias fotográficas, croquis del lugar, levantamiento de rastros, toma de testimonios a personas que se encontraban en el evento, familiares de las víctimas y allegados.

Asimismo, requirió el relevamiento de las cámaras de videovigilancia para determinar la mecánica del hecho y poder identificar a los autores del triple crimen.