Un agente de la Guardia Urbana Municipal (GUM) fue atacado anoche a balazos cuando su patrulla intervino en una fiesta clandestina que se desarrollaba en una casa de la zona oeste rosarina, según informaron fuentes policiales.

La fiesta clandestina, que viola el distanciamiento social, preventivo y obligatorio dispuesto para mitigar la pandemia de coronavirus, se desarrollaba esta madrugada en una vivienda de la calle Camilo Aldao y avenida Pellegrini, del barrio Azcuénaga, cuando una patrulla de la GUM intentó intervenir y fue recibida a balazos, indicaron las fuentes.

Los agentes municipales pidieron refuerzos policiales y efectivos de la Agrupación Cuerpos detuvieron en un pasillo a un joven con un revólver 32 milímetros largo.

Material secuestrado por la Policía.

En tanto, otro joven se dio a la fuga por el mismo pasillo y se refugió en una casa, pero los efectivos policiales también lo detuvieron mientras huía con un revólver calibre 22 y municiones de 9 milímetros y de un revólver 22 largo.

La policía detuvo en total a cinco jóvenes de 26, 22, dos de 21 y otro de 14 años.

Por su parte, varias personas arrojaron piedras a los agentes para entorpecer las detenciones e incluso intentaron arrebatarle la escopeta a un efectivo.