El cuerpo sin vida de un hombre de unos 40 años fue hallado este viernes por la mañana en una zona rural cercana a la localidad de Totoras. El cadáver se encontraba en el interior de una camioneta incinerada y argumentan que se trataría de «un ajuste de cuentas».

El macabro hallazgo se produjo luego de un llamado al 911 por parte de la empresa de seguridad SITRAC, en el cual informaban que un vehículo Fiat Fiorino estaría con alarma de pánico encendido por siniestro, incendio o robo, en un camino rural de Luis Palacios.

Debido al mal clima y al gran caudal de agua que caído en la provincia el viernes por la mañana, personal policial tuvo que llegar a la zona trasladado por una Pick up 4×4 de un vecino de la zona. El vehículo en cuestión fue encontrado a la altura del km 22, a 8 km al norte camino dirección a Andino.

Según informaron fuentes policiales, en el interior del vehículo que, había sido previamente incinerado, se encontraron restos óseos de lo que se suponía que era un hombre.

Pasadas las horas, se identificó a la víctima Bruno Galetti y se comprobó que era oriundo de Totoras, ciudad de la cual había partido cerca de las 3 de la mañana en dirección a su trabajo en la Empresa aceitera SL pero nunca llegó.

Previo a lo sucedido, ingresó una averiguación de paradero en Comisaría 3ª de Totoras de la Unidad Regional X. Denunciaban la desaparición de un hombre desde horas de la madrugada ya que no respondía las llamadas.

Luego del hallazgo, el fiscal Dr. Aquiles Balbis y la Agencia de Investigación Criminal comenzó con las medidas investigativas en relación al hecho. En tanto, el abogado de la victima, Luis Rossini dialogó con un medio radial de Cañada de Gómez y aseguró que se trató de «un ajuste de cuentas» y que todo el hecho estaba planeado. «No lo llevaron por la fuerza, se iba a encontrar con alguien», remarcó.