Una violenta entradera se produjo en la noche de ayer, alrededor de las 23.30, en una vivienda ubicada en Anchoris al 1500, en la zona norte de la ciudad, cuando entre cuatro y cinco delincuentes fuertemente armados irrumpieron en la casa buscando un jugoso botín.

Según el relato de María, la víctima, los ladrones redujeron al hijo que estaba con unos amigos lavando el auto en la puerta de la casa y bajo amenaza con armas de fuego los obligaron a ingresar al domicilio donde se encontraba el resto de la familia.

Una vez adentro, los golpearon y les exigieron una suma de dinero que no poseían. Los delincuentes tenían ametralladoras y chalecos antibalas, según relató la víctima.

En declaraciones radiales, María contó que “buscaban plata, pero yo no tengo. Se confundieron. Se llevaron plata que mi hijo estaba juntando, pesito por pesito, para pagarse un auto que se compró hace poco”. También agregó “para mí tenían un dato equivocado porque buscaban dinero por todos lados”, se lamentó.