Por Alejandra Ojeda Garnero 

Hoy se cumplen 130 años de la lucha de los trabajadores de la empresa Mc Cormick que en esta fecha, pero de 1886, iniciaron una huelga en reclamo de la jornada laboral de 8 horas luego de varias jornadas  de protesta más trabajadores se sumaron al reclamo pero la policía inició una represión que en principio dejó seis muertos.

La lucha obrera se recrudeció como así también la represión policial que en pocos días se convirtió en una revuelta en la cual una bomba estalló en las filas de la policía, hecho que generó un ataque a mansalva contra los trabajadores.

Para reflexionar acerca de esta emblemática fecha, Conclusión dialogó con Carlos Solero, licenciado en Ciencia Política y docente de la Universidad Nacional de Rosario, quien manifestó que “es bueno que se haya recuperado el significado de la fecha, porque últimamente se mencionaba como el día del Trabajo que no tiene nada que ver con el día del trabajador porque el trabajo es una actividad que los trabajadores realizamos”.

Rememorando los orígenes de la conmemoración Solero manifestó que “esta fecha evoca la lucha de los trabajadores por la jornada laboral de 8 horas que se libró en Chicago en 1886. Que además significó el asesinato de muchos militantes anarquistas que habían participado en varios mítines que habían comenzado en abril de 1886 y finalizaron en noviembre del mismo año con la detención y posterior muerte de aquellos trabajadores. Esa es la referencia histórica”.

El 1º de mayo no es casual ni al azar porque “en 1890 un Congreso de Trabajadores socialistas tomó esta fecha emblemática, por la lucha de los trabajadores que fueron asesinados y encarcelados, en noviembre de 1886, es decir que fueron a prisión donde fueron torturados y algunos ejecutados en noviembre del mismo año” y en homenaje a esos hombre que lucharon con la  bandera de la igualdad, la libertad y la justicia.

Pero, lejos de las luchas actuales, los trabajadores de otrora “no luchaban sólo por la reducción de la jornada de trabajo sino que como tenían una ideología socialista libertaria, es decir anarquista, ellos luchaban por la abolición del capitalismo, por la abolición del trabajo asalariado y por la organización de la sociedad basada en la autogestión de los medios de producción por parte de los productores directos, es decir de los proletarios”, aseguró Solero.

En un breve recorrido poco la historia, el profesor hace referencia a que “el 1º de mayo ha sido distorsionado por distintos gobiernos, sobre todo los de ideología totalitaria, tanto el fascismo italiano de Mussolini como el nacional socialismo alemán de Adolph Hitler, también la propia Unión Soviética sobre todo el comunismo de Stalin”, que lejos estaban de la forma de pensar un mundo socialista.

“Sabiendo además que las condiciones laborales en los distintos países del mundo son bastante cruentas, la Unión Soviética, en aquellos momentos se caracterizó por el culto a la jornada de trabajo extendida, es decir todo aquello que iba a contramano de lo que tenía que ser una sociedad socialista, además de ser una sociedad sumamente desigual”, rememoró.

En relación a los días que se viven en la actualidad en relación al mundo laboral, Solero llamó a la reflexión porque según su visión “además de preocuparnos, debería incitarnos a pasar a la acción solidaria con todos los trabajadores y trabajadoras en este territorio del  mundo que es Argentina, frente a la ola de despidos masivos que ha producido el actual gobierno nacional”, en los pocos meses de gestión.

Con respecto a los trabajadores que iniciaron aquellas luchas obreras y los de la actualidad, el profesor de la UNR resaltó que “la diferencia fundamental está dada en que aquellos trabajadores tenían una conciencia de clase desarrollada y tenían una vocación de cambio radical de la sociedad y creo que el capitalismo y la sociedad de consumo ha generado una sociedad de productores-consumidores que en la medida que tienen poder adquisitivo cada día están más endeudados” pero por el sólo hecho de adquirir productos que no son necesarios, sino que son impuestos por el capitalismo.

Para Solero, esto “tiene que ver con una cuestión de trabajo ideológico que se viene haciendo desde los años noventa a nivel mundial y que es una especie de lavado de cerebro”.

“Quizás sea una de las claves de por qué tenemos el gobierno que tenemos a nivel nacional”, reflexionó.

En el año 1890, en Rosario, la plaza López fue el lugar elegido para la concentración del primer acto conmemorativo del 1º de mayo. Ese día desde las 11 los manifestantes se fueron acercando al lugar, portando carteles “negros con letras rojas”, uno de ellos con la inscripción: “1º de Mayo de 1890 – Fraternidad Obrera Universal”, llevado por Virginia Bolten. La columna de 1.000 manifestantes, partió custodiada por seis bomberos a caballo con sus Remington.

Hoy los anarquistas también realizarán un acto organizado por la Biblioteca y archivo histórico social Alberto Ghiraldo, a las 16 en la plaza Sarmiento (Entre Ríos y San Luis) donde habrá oradores, publicaciones anarquistas y dos cantautores que brindarán un show.