La presidenta Cristina Fernández de Kirchner encabezó en Campana, el acto inaugural de producción del nuevo modelo de la automotriz Honda, el HR-V, un SUV compacto del que se producirán unas 15.000 unidades anuales.

El nuevo SUV -o crossover como destaca la marca- tendrá en un principio un contenido de piezas locales cercano al 21% y se incrementará gradualmente, y en una primera etapa demandó el desarrollo de 60 autopartes con proveedores.

En su discurso, destacó la importancia de las inversiones que realiza el Estado y cargó contra quienes postulan la necesidad de aumentar la inversión a costa de disminuir la demanda porque -sostuvo- “no hay ninguna otra manera de achicar la demanda que reduciendo los salarios”.

“Para aumentar la inversión, hay que disminuir un cachito la rentabilidad o traer alguna de la que se llevaron afuera”, postuló esta tarde la mandataria, quien sostuvo: “nada de achicar la demanda porque eso implica achicar los salarios”.

En seguida, agregó que «es mentira que haya que achicar la demanda» para estimular la producción y dijo que esas afirmaciones son el «pescado podrido» que los argentinos debieron comer durante muchas décadas.

«Comimos durante muchas décadas pescado podrido y no queremos indigestarnos de vuelta», denunció.

En otro orden, señaló que Brasil «está estudiando la política de bonos K» de la Argentina, las compensaciones para los productores de bienes de capital, por eso «los que dicen que no hay políticas de industrialización es pour la gallerie».

«Esto es lo que nosotros tenemos que hacer con mas intensidad en la Argentina», señaló la Presidenta.

La presidenta, celebró también los resultados alcanzados en los seis meses que lleva de implementación el programa Ahora 12 al señalar que, en ese lapso, se concretaron “más de 7 millones de ventas por más de 13.000 millones de pesos”.

Otra inauguración

A través de las ya habituales videoconferencias, la primera magistrada inauguró también la nueva capacidad instalada de la Planta Piloto de Procesos Industriales Microbiológicos (Proimi) ubicada en la capital de Tucumán que permitirá generar y validar la producción de productos para la salud y el agro.

“Es un orgullo ver gente joven dedicada a la ciencia y tecnología y a la investigación que tanto necesitamos en ingeniería, química y biotecnología que es donde va a estar uno de nuestros nichos importantes en materia de investigación y desarrollo”, señaló Cristina desde la ciudad de Campana.

En la comunicación, desde San Miguel de Tucumán, participó el presidente del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), Roberto Salvarezza, quien señaló estar “muy contento” por la nueva capacidad del Proimi, uno de los 11 institutos que el organismo científico tiene en la provincia.

“Desde el punto de vista tecnológico este acto tiene un significado muy grande porque este instituto, dedicado a la biotecnología microbiana, posee investigación en el laboratorio y capacidad instalada”, manifestó el directivo que estuvo junto al gobernador de Tucumán, José Alperovich, y su vice y ex ministro de Salud, Juan Manzur.

“Ahora se sumó una posibilidad mayor que es el de la producción. Estamos habilitando una planta de buenas prácticas, es decir que es posible fabricar bajo estándares internacionales lo que marca el círculo virtuoso desde el laboratorio a la producción”, añadió.

Salvarezza subrayó que el Proimi tiene ahora una capacidad instalada “que no existe en el sector público ni privado” lo que va a tener “un impacto importante porque se trata de mejoramiento de productos para la salud, para la sanidad animal, con impacto en el agro”.
En ese sentido, la directora de la planta piloto, Lucía Catellanos de Figueroa, indicó que el instituto posee ahora un biorreactor de 1.500 litros que «es único en el país”.

La científica precisó que gracias a esto se “puede hacer desarrollo a partir de biomasa bacteriana, biofármacos, bioterapéuticos”, entre otros sectores.

Manifestó que por un ladro la planta se dedicará a la producción propia pero además hará transferencia tecnológica y científica a otras fábricas y sectores de la economía.

“O sea, hacen transferencia tecnológica para la economía. Esto es ciencia aplicada, para las distintas actividades como las farmacia y el agro”, completó Cristina.

De la videoconferencia también participó uno de los investigadores de la planta, Leandro Sánchez, de 32 años, licenciado en Biotecnología y doctor en Ciencias Biológicas.

“Es un orgullo poder presentar nuestra nueva planta del Proimi. Hace 10 años que trabajo acá y el avance que veo en esta planta es impresionante. Era muy distinta a la de hoy que puede trabajar con procesos microbiológicos y producir bioproductos”, manifestó el joven oriundo de Jujuy.

“Lo importante de esta inauguración no es solamente el fermentador de 1.500 litros sino que se adecuaron todos los servicios para que abastezcan a este fermentador: la calidad de agua, la presión de vapor, calderas”, sostuvo.

Por su parte, una becaria del Conicet que está haciendo su doctorado en el instituto tucumano, Paola Manfredi, aprovechó la ocasión para agradecerle a la Presidenta por la política de Estado de impulsar la ciencia.

“El año pasado fui beneficiada con una beca del programa Becar de formación en el exterior y estuve 7 meses en España, lo cual significó un gran aporte a mi formación académica y personal”, manifestó la ingeniera química.

Al final de la videoconferencia la Presidenta agradeció a los científicos “por el empeño que ponen y el orgullo de hacer cosas” y les dijo a los becarios que “menos mal que resistieron y aguantaron para que la ciencia y la tecnología vuelva a ser una política pública de gobierno”.

El Proimi, ubicado en la avenida Belgrano y Pasaje Caseros de la ciudad de San Miguel de Tucumán, emplea a cien personas entre científicos, becarios, técnicos y personal administrativo.