A pocas horas de que la ministra de Economía, Silvina Batakis, pusiera el foco en el uso de dólares para financiar el turismo, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) cerró un nuevo canal de salida de divisas, al prohibir el pago en cuotas de compras realizadas en “tiendas libres de impuestos”, habitualmente conocidas como “free shops”.

De esta forma, quienes deseen realizar compras en esos puntos de venta deberán optar por realizarlas en un solo pago.

“El Directorio del Banco Central de la República Argentina restringió la posibilidad de pagar en cuotas con tarjetas los consumos en las tiendas libres de impuesto”, afirmó el BCRA en un comunicado de prensa.

En trabajo por cuidar cada billete “verde”, la autoridad monetaria sumó esta nueva disposición a las ya vigentes, que afectaban a los movimientos de personas y bienes en el exterior.

La semana pasada el BCRA estableció que las entidades financieras y los proveedores no financieros de crédito (tanto las empresas no financieras emisoras de tarjetas de crédito y/o compra como los otros proveedores no financieros de crédito) no deberán financiar en cuotas las compras de sus clientes en pasajes y servicios turísticos en el exterior y productos provenientes del exterior que se reciben por el sistema puerta a puerta.

De esta manera, las entidades financieras y los proveedores no financieros de crédito no podrán financiar en cuotas las compras de sus clientes en pasajes al exterior y servicios turísticos en el exterior (tales como alojamiento, alquiler de auto, etc.); productos en el exterior que se reciban por el sistema de envíos postales sin finalidad comercial; y, ahora, productos en tiendas libres de impuestos.

La falta de dólares preocupa al gobierno de Alberto Fernández. Si bien las liquidaciones de divisas del campo están en niveles récord, los mayores gastos para la importación de energía las restan de las reservas de Banco Central apenas son acreditados.

Por eso antes de renunciar, Martín Guzmán, y el titular del BCRA, Miguel Pesce, apretaron el cepo al máximo para las empresas y pudieron cumplir con fórceps la meta impuesta por el acuerdo con el FMI.

Pasado el 30 de junio –fecha límite para la segunda revisión- se tuvo que habilitar pagos y el drenaje se reinició.

A fines del año pasado se había prohibido la venta en cuotas para pasajes y servicios turísticos y la semana pasada se añadió la imposibilidad de financiar mes a mes productos del exterior que se reciben por el sistema puerta a puerta.

No obstante, y a pesar de las distintas medidas, el BCRA no deja de perder divisas. Este jueves se vio obligado a ceder US$ 80 millones y elevó la pérdida desde el inicio del mes a US$ 650 millones.

En tanto, Batakis apuntó el pasado miércoles contra la pérdida de dólares por turismo al afirmar que “el derecho a viajar colisiona con el derecho al empleo”.

Un desembolso millonario para atender el turismo en el exterior

En los primeros cinco meses del año el BCRA destinó US$ 1.516 millones para atender “servicios de consumos con proveedores no residentes”, es decir, compras en el exterior y servicios como alojamiento, alquiler de auto, etc.

Ese monto resultó tres veces superior al girado en el mismo período de 2021 cuando, aún con restricciones por la pandemia, la autoridad monetaria sólo tuvo que gastar por esa vía US$ 491 millones.

Inmediatamente se instaló la idea de que el gobierno avanzaría en restricciones para los gastos con tarjetas de crédito en el exterior.
La apertura de todas las fronteras pospandemia apuró la reconstrucción del mercado de viajes en todos sus segmentos y por ende se multiplicó la demanda de divisas.

La proximidad de las vacaciones de invierno y hacia fin de año -cuando además el ingreso de divisas se restringe- el Mundial de Fútbol en Qatar son dos factores que están en la mira de nuevo gabinete económico.

Pero si bien esta es la información de pagos al exterior por parte del BCRA, la película no es completa ya que la balanza de turismo es ficticia debido a la existencia del “blue”.

El turismo receptivo en la Argentina no liquida los dólares en el mercado oficial a mitad de precio y por ende no hay un registro válido si con la actual cotización del dólar el saldo es positivo o negativo.