El consumo interno de carne bovina caería 8,7% interanual hasta los 2.200.000 toneladas de res con hueso (r/c/h) en 2024, lo que representa una merma de 200 mil toneladas respecto del año previo, al tiempo que se proyectan simultáneas bajas en la producción y en las exportaciones, según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).

La entidad bursátil proyectó en promedio mermas interanuales 8% en la producción y del 6,1% en los despachos al exterior.

En este sentido, el informe sostiene que la producción caerá durante el año que viene, estimando una producción de 3.024.000 de toneladas r/c/h, frente a las 3.285.000 de 2023. Esto se da debido a que durante el último año, los frigoríficos nacionales han destinado el faenado de vacas productoras, cuya función es la generación de novillos nuevos para el engorde. Juan Ramos, titular de la asociación de carniceros explicó a Conclusión que dicha decisión tuvo que ver con el incremento de erogaciones que debieron enfrentar los ganaderos debido a la crisis producida por la sequía, lo cual los llevó a vender más vacas.

“Ya lo hemos pasado otras veces, de tener una salida tan grande de vacas. Los años 2024 y 2025 van a hacer años bastante complicados en ese tema“, sostuvo Ramos, y subrayó que la sequía llevó a la muerte a una gran cantidad de animales: “Hubo zonas donde murió muchísima hacienda y el productor tuvo que salir a vender sí o sí todo lo que tenía y todo lo que podía para vender”.

Con la misma tendencia, proyectaron un descenso en las exportaciones hasta las 824.000 toneladas respecto a las 877.000 toneladas del año previo. De acuerdo a la BCR, el contexto económico del 2023 repercutió severamente en el mercado de carne vacuna.

En esa línea, contextualizaron que “el año 2023 va a quedar en la historia de Argentina por haber sido testigo de una de las peores sequías experimentadas por el país: la producción de granos se redujo en cerca de un 40% interanual”, lo que generó “serias dificultades para la economía argentina, dado que las cadenas agroindustriales aportan 1 de cada 4 pesos recaudados por el Estado Nacional, emplean a 1 de cada 5 trabajadores del sector privado, dan cuenta de 2 de cada 3 dólares que ingresan al país por exportaciones y representan el 20% del PIB argentino”.

Por otro lado, destacaron que “al haber escasez de pasturas como resultado de la falta de agua, los agentes de la actividad ganadera se vieron obligados a enviar una gran cantidad de cabezas a faena, resultando en elevados números de producción y de exportaciones, así como en una recuperación del consumo respecto de los dos años anteriores”.

En esta línea, precisaron que en los primeros 11 meses del año, se faenaron 13,4 millones de cabezas, un 9,7% por encima del promedio de los últimos 5 años para el mismo período, al tiempo que se habrían exportado más de 800.000 toneladas (res c/ hueso equivalente), un 23,6% por arriba del promedio.

Además, la BCR estimó que el consumo interno alcanzó las 2,2 millones de toneladas, es decir un 2,4% más que el promedio de los últimos 5 años.

Respecto del próximo año, por otro lado, la entidad destacó que para 2024 estiman que el consumo de carne bovina representará el mayor porcentaje del consumo de carnes argentino: el informe se espera que el consumo interno ronde el próximo año las 5,1 millones de toneladas, de las cuales la carne bovina explicará en 2024 el 43%, seguido por la aviar en un 42% y porcina en un 15%.

Además, la BCR consideró para 2024 que “un sostenimiento del fenómeno El Niño sería favorable, en principio, para las pasturas y la posibilidad de hacer una transición hacia una fase de retención de stocks, y asumiendo este escenario, se estima que en el año 2024 la faena presentaría una disminución del 9% interanual, ubicándose en niveles cercanos a 13,1 millones de cabezas”.

Por otro lado, respecto de la demanda, de acuerdo al informe se proyecta que el año que el volumen exportado de carnes alcance un valor de aproximadamente US$ 2.645 millones, aportadas en un 90% por la carne vacuna, 9% por la aviar y 1% por la porcina, marcando una caída del 4% interanual.

No obstante, las denominadas carnes complementarias – aviar y porcina- podrían registrar alzas en sus indicadores en 2024.

Así, en el caso de la carne aviar, la BCR estimó una suba interanual de 2,8% en la producción hasta las 2.353.000 toneladas; de 1% en el caso del consumo; y una variación positiva de 31,6% en las exportaciones .

También registraría variaciones positivas en todos sus indicadores el sector porcino, ya que la entidad proyectó una suba de 4,1%en la producción, de 2,9% en el consumo y de 4,3% en las exportaciones.