Las petroleras aumentarán el precio de los combustibles hasta 7% este fin de semana, con un nuevo aumento que se suma a un incremento acumulado superior a 65% en lo que va del año.

Axion fue la primera en aplicar los aumentos en la medianoche de hoy -con una suba de 7% en el diésel, 5% en la nafta súper, 4,1% el diésel premium y 3,6% la nafta premium-, y se espera que las demás empresas se sumen en las próximas horas.

La suba del dólar es uno de los principales argumentos de estos incrementos y pese a baja de la divisa en las últimas semanas, las naftas registran nuevos aumentos.

En este contexto, la venta de combustibles en las estaciones de servicio cayó en septiembre un 6,65% respecto al mismo mes de 2017, con un marcado derrumbe del 27,5% de la demanda de naftas premium.

De acuerdo con cifras oficiales de la Secretaría de Energía, las ventas de gasoil cayeron 7,84% interanual en septiembre, y la de gasoil premium 7,39%, mientras que la nafta súper fue el único producto que se mantuvo en alza con 4,95% positivo, al absorber parte del traspaso del consumo de nafta premium que cayó 27,5%

Los combustibles ya llevan un aumento superior a 65% promedio durante 2018 y desde las compañías petroleras venían advirtiendo que aún se registraba un retraso de los precios internos con respecto a los valores internacionales.

«Hasta ahora le gente venía restringiendo calidad de producto, migrando de la premium a la súper, por eso la demanda general se mantenía relativamente estable», explicó Carlos Gold, presidente de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos de Argentina (Cecha).

«Hay que mirar los datos en contexto, la gente absorbió hasta agosto más de 40% promedio de aumento de las naftas, pero solo en septiembre hubo tres subas que significaron un aumento por arriba del 10%, evidentemente el bolsillo no da más», agregó.

En un rubro que cuenta con más de 60.000 empleados, los estacioneros alertan sobre la rentabilidad de negocio y advierten que muchos asociados ya se encuentran en el punto de equilibrio, es decir el límite entre la rentabilidad y la pérdida del negocio.

La petrolera YPF, que lideró el mercado con 57% de las ventas de naftas, retrocedió 4,1% el expendio de combustibles; Shell, con 20% de las ventas totales de naftas, retrocedió 8,8%; mientras que Axion, con 15% de participación, retrocedió 4,6%.