El presidente Alberto Fernández expresó esta mañana la necesidad de «saber qué pasó» con Facundo Astudillo Castro, el joven que fue visto por última vez el 30 de abril cuando salió de la localidad bonaerense de Pedro Luro, y sostuvo que «en un estado de derecho, la violencia institucional es inadmisible» y «no hay ningún espacio para la tolerancia».

El mandatario agregó que está en contacto con la madre del joven, Cristina Castro y con la ministra de Seguridad, Sabina Frederic, y «atento al funcionamiento de la Justicia». Y en relació a ello, detalló:: «La madre me advirtió algunas cosas que me preocupaban».

«Soy alguien que valora mucha la presencia del estado de derecho y creo que puede ser posible que en la Argentina funcione a pleno pero, para eso, hay que corregir cosas», añadió.

Entre ellas, citó «cuestiones en la Justicia no sólo por el juez que juzga, sino también por los procedimientos, y habrá que corregir el funcionamiento de las fuerzas de seguridad si es necesario, y del funcionamiento del sistema penitenciario también». «Son todas cuestionas sobre las que hay que trabajar y hay que ser inflexibles», dijo Fernández, tras recordar que, cuando observó «una situación en el Chaco», puso «el grito en el cielo», del mismo modo que cuando sucedió en Tucumán, en referencia a casos de violencia institucional.

No obstante, afirmó que este caso -en referencia al de la desaparición de Facundo Astudillo Castro- es «un poco más complejo» teniendo en cuenta «el tiempo que ha pasado y que hubo un mes -cuando todavía no se había establecido la carátula de desaparición forzada- que es una suerte de limbo en el tiempo, que no sabe qué pasó». «Pero necesitamos saber, y su madre sabe de mi compromiso con ella», remarcó el Presidente.

Astudillo Castro, de 22 años, fue visto por última vez el 30 de abril pasado cuando salió de la localidad de Pedro Luro, con dirección hacia Bahía Blanca.

Ayer, la fiscalía federal de Bahía Blanca a cargo de la causa por la desaparición pidió que investiguen presuntas «irregularidades» por parte de efectivos de la policía provincial durante un procedimiento realizado en la casa de la exnovia del joven.