Por Manuel Parola

La aplicación Mercado Pago anunció por medio de sus redes oficiales que los usuarios podrán cobrar las Asignaciones Universales por Hijo (AUH), Asignaciones Familiares y por Embarazo, Progresar y Programa Hogar y fue festejado tanto por el titular de la empresa, Marcos Galperín, y el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación Martín Menem. Ambos destacaron que la operación a partir de ahora será “sin intermediarios, sin partidos políticos y de manera transparente” entre el Estado que deposita y el beneficiario que los cobra. Los dichos del legislador libertario fueron criticados por falaces, pero sobre todo por los millonarios negocios en dólares que le habilita a Galperín la posibilidad de disponer de los fondos de pensiones.

“Los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo, Asignaciones Familiares y por Embarazo, Progresar y Programa Hogar ya pueden cobrar estas prestaciones de manera totalmente gratuita a través de Mercado Pago”, publicó la billetera virtual de Mercado Libre el viernes pasado en su cuenta oficial de X. En su comunicado la empresa sostuvo que “las personas que ya cobran asignaciones de Anses a través de Mercado Pago comenzaron a generar rendimientos y redujeron el uso de efectivo casi de inmediato”.

En 2019, el incipiente gobierno de Alberto Fernández habilitó por medio de la resolución 39/2019 de la Anses la posibilidad de que las billeteras virtuales pudieran ser bocas de cobro de las prestaciones sociales. No obstante, este acuerdo nunca se reglamentó debido a que perdió prioridad tras la declaración de emergencia sanitaria en marzo de 2020 por la pandemia de coronavirus.

La realidad es que antes de esta determianción oficial, los usuarios percibían las asignaciones en sus cuentas personales de forma directa. Con la aparición de Mercado Pago como boca de dispendio, aparece un primer intermediario entre el Estado que deposita y el usuario que cobra ese derecho asignado por ley.

El sitio web de Mercado Pago advierte que «no está autorizado por el Banco Central a operar como entidad financiera” por lo cual “los fondos acreditados en cuentas de pago no constituyen depósitos en una entidad financiera ni están garantizados conforme legislación aplicable a depósitos en entidades financieras«

La Administración Nacional de Seguridad Social (Anses) liquida los beneficios el día 16 de cada mes y transfiere los fondos a los bancos para habilitar el cobro el primer día hábil posterior. Ahora bien, según explicó el abogado y Magíster en Estudios Avanzados en Seguridad Social, “desde el día 16 de un mes, hasta el primer día hábil del mes siguiente, los bancos y ahora Marcos Galperin ponen el dinero de la seguridad social que es de todos los argentinos a hacer negocios que le da intereses a él, pero que no impactan en los beneficios que después paga”.

“O sea que el presidente Javier Milei y el Director Ejecutivo de la Anses Mariano de los Heros le entregaron negocio a alguien que tiene una exención para no pagar las cargas sociales”, sostuvo el especialista desde su cuenta personal de X. Además, Fernández Pastor recordó que al igual que Mercado Libre (los grupos multimediáticos) «Clarín y La Nación no pagan cargas sociales, porque las triangulan con IVA, o sea, que desfinancian a la seguridad social”.

El negocio de la billetera virtual está en la obtención de los intereses generados por los nuevos usuarios que la empresa obtiene según aclaró la doctora en economía Mercedes D’Alessandro, quien señaló que los intereses producidos por los Customer Acquisition Cost (CAC) para las fintech se encuentra entre los 100 y los 500 dólares por cada nuevo usuario. «Supongamos que el CAC de Galperin es de US$200», especuló desde su cuenta oficial de X y siguió: «Por cada AUH le están regalando US$200. Hay 2,5 millones de AUH», lo que daría un total de 500 millones de dólares mensuales al sólo efecto de intermediar las asignaciones.

«A eso sumale la bicicleta financiera y los subsidios de 100 millones anuales por la LEC» (denominación legal de las empresas de intercambio local), culminó la economista.

¿Qué hay detrás de Mercado Pago?

La fintech de la cual Marcos Galperíon es el CEO es parte de una empresa, Mercado Libre, que está muy lejos de ser argentina como tal. Si bien su fundador es oriundo de Argentina, la empresa está radicada en Delaware, un estado norteamericano distinguido por sus facilidades para registrar empresas y sus facilidades fiscales -o sea, un paraíso fiscal– y es controlada por sociedades holandesas y neozelandesas.

La Inspección General de Justicia (IGJ) publicó el 16 de diciembre de 2020 una resolución donde no permitieron la registración en Argentina de una empresa titulada “SFSC LLC”, la cual estaba integrada exclusivamente por la empresa “MERCADOPAGO LLC”, que a su vez tiene como titular del total de su capital social a una tercera empresa, “MELI PARTICIPACIONES SL”, constituida en España. No obstante, tanto la primera como la segunda 

La intención era registrar a “SFSC LLC” como una “sociedad vehículo”, la cual fue denominada por la justicia en un fallo de 2008 como “un tipo de sociedad que no tiene una verdadera actividad comercial o industrial y cuyo único propósito es ocultar la identidad de las personas jurídicas o físicas que efectivamente toman las decisiones y llevan adelante la actividad comercial, así como la de quienes son los verdaderos propietarios del capital”. De todas formas, lo interesante de la resolución es la descripción del entramado empresario que hay detrás de la firma Mercado Pago. Un entramado cuyos espacios de radicación tienen algo en común: estos lugares no pagan impuestos.

Resolucion Particular 0000530 by Conclusión TV