A pocos días de que Mauricio Macri deje el gobierno, el presidente del Banco Nación, Javier González Fraga, ascendió a dos asesores a puestos gerenciales con sueldos de $200.000. Es decir que cobrarán lo mismo que un gerente de las mayores sucursales.

Según La Política Online, uno de los empleados promovidos ingresó en enero de este año y es un hombre del ex director del banco Diego Dequino, quien viene del riñón del ex ministro Luis Caputo.

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En tanto, la otra funcionaria llegó en abril del 2019 por un pedido expreso de Nicolás Dujovne. Por lo tanto, violan claramente los protocolos de la carrera bancaria.

Ambos ocuparían una nueva «Unidad Organizativa» creada especialmente para la ocasión que tendría por función actuar como una «banca de inversión de finanzas sustentables» y se ocuparía de colocar Obligaciones Negociables para apoyar proyectos que promuevan el cuidado del medio ambiente.

Según La Política Online, la decisión fue avalada por el gerente general Juan José Fragati. El problema es que esta «conducción de tareas relacionadas con la emisión propia», representa una estructuración de deudas que contradice con lo establecido por la propia Carta Orgánica de la entidad.