Con el norte puesto en su candidatura presidencial, Patricia Bullrich se vale de distintos métodos para financiar su campaña. Así, desde hace un año y medio que, al módico precio de 50.000 pesos, ofrece almuerzos con empresarios y militantes que quieran conversar con ella.

Las fuentes cercanas a su entorno señalaron que «por lo general, duran dos horas, pero muchas veces se extienden». Al principio ella expone las ideas que tiene durante una hora, se come, se hacen preguntas, se contesta, y luego termina como una charla cotidiana”.

Generalmente, los encuentros se organizan en hoteles cinco estrellas de la ciudad de Buenos Aires y los asistentes son empresario de distintos rubros: agro, software o textiles. La ex ministra de las carteras de Seguridad y Trabajo suele asistir con especialistas de esos sectores.

El ex vice ministro de Seguridad y hombre de confianza de Bullrich, Gerardo Millman, explicó que «tiene muchos gastos el PRO y no tiene fondos para financiar ni siquiera a su propia presidenta».

Según detalló el periodista Antonio Riccobene en el portal Perfil.com, una de las personalidades que eligió almorzar con Bullrich reveló que en el almuerzo hubo primer plato, plato principal postre y café o te.

Además de los almuerzos, Bullrich tiene otro mecanismo de financiación, que son donaciones que se hacen mediante el Instituto de Estudios Estratégicos de Seguridad, que ella misma preside. “No está vinculado al partido”, aclararon en el PRO. Allí se facturan estos encuentros y quedan registrados.