«Quisieron otra cosa y es respetable» admitió el presidente Alberto Fernández en una entrevista en la cual se le consultó sobre la decisión del plantel dirigido por Lionel Scaloni de no asistir a Casa Rosada para la histórica foto en el balcón.

«No era una celebración del Presidente de la República, era de los jugadores. Celebré y disfruté mucho de ver a la gente disfrutar» afirmó el mandatario en diálogo con Radio con Vos. «Soy un futbolero consumado y veo las cosas de otra manera. Sabía que el nivel de agotamiento era muy grande y que querían que la celebración sea breve. Les dije a las autoridades de AFA que tenían a disposición Casa Rosada».

Asimismo, Fernández calificó como «una fiesta popular sin antecedentes» a la masiva cantidad de gente que salió a las calles a festejar y aseguró que su trabajo fue facilitar las cosas para que la sociedad celebrara con la Selección campeona. «Fue una alegría para la gente. No me importa no recibirlos si estaban cansados y querían hacer otra cosa. Yo los respeto, y les agradezco el esfuerzo de estar bajo el sol, saludando a la gente. Era lo que yo quería», completó el Presidente.

El mandatario aclaró que ofreció el balcón de Casa de Gobierno, y responsabilizó también a la grieta por la negativa de los futbolistas a asistir. Además, diferenció el recibimiento institucional del Gobierno al intento de acercamiento del exmandatario Mauricio Macri.
«Quiero aclarar que les ofrecí para que ellos salieran al balcón, pero la grieta existe, y a muchos los asusta. Muchos personajes públicos que no quieren quedar pegados en ningún lado», manifestó en declaraciones radiales, y agregó: «De cualquier manera, una cosa es ver institucionalmente al Presidente de la República y otra es ver a un expresidente. No los hubiera recibido como presidente del PJ sino de la República».

A su parte, aseguró que no se sintió ofendido ni agraviado y reveló que, si bien no mantuvo aún comunicación con el plantel, Alejandro «Papu» Gómez le escribió un mensaje por Instagram. «No hablé con nadie, tampoco lo intenté. Solo quería que se reconfortaran con el cariño del pueblo, y lo logré. Habrá tiempo de hablar con (Lionel) Messi, con (Lionel) Scaloni y con (Alexis) Mac Allister, que es de Argentinos Juniors», indicó. «Hay que dejar de pensar tanto en uno mismo. La Selección no es mía, no es de la oposición, es de todos. Está por encima de todos nosotros. Hay algo que nos lleva a apropiarnos de cosas que son de todos, todos les debemos gratitud y respeto», planteó.

Asimismo, el Jefe de Estado reiteró sus intenciones de «no mezclar fútbol con política» y manifestó que es «el único Presidente que no recibió a un equipo campeón del mundo», pero también, el único que «durante su mandato ganó la Copa América, la Copa Intercontinental ganándole a Italia 3 a 0 en Wembley y la Copa del Mundo».

El Presidente también hizo una comparación entre los festejos por la coronación de la Selección y la crisis del 19 y 20 de diciembre de 2001: «Hace unos años atrás, un 20 de diciembre en esta misma plaza había muertos, y ayer hubo una alegría desbordante».

«No somos ese pueblo de miércoles que algunos dicen, no, somos el pueblo que vieron ayer. Nos quieren hacer creer que hay que bajar los brazos, que el problema son los sindicatos, pero eso es mentira», ponderó, en un clara crítica a Macri. Luego de las críticas del titular de la AFA, Claudio «Chiqui» Tapia, el mandatario aclaró: «Ayer todo transcurrió en orden, con alegría y sin inconvenientes. La caravana no pudo seguir por la cantidad de gente que había. El presidente de la AFA quería que el recorrido se hiciera más extenso, y creo que todos habrán puesto su mejor voluntad».

Por último, en sintonía con lo expuesto por su ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, subrayó: «El operativo se desarrolló conforme con lo que pidió la AFA».