Por Jorge Alberto Ripani

Para analizar con precisión las esquirlas de las Paso nacionales y el camino hacia octubre, hay que intentar desintoxicarse lo máximo posible de las redes sociales y los medios de comunicación partidarios y de su propio apasionamiento (todos tienen su corazoncito en alguna parte). Como diría Maquiavelo “entro en mi estudio, en cuyo umbral me despojo de aquel traje de la jornada, lleno de lodo y lamparones, para vestirme ropas de corte real y pontificia”. Pensar en la política real. Ahora veamos.

Perdieron las denominadas “avenidas del medio” (Massa, Randazzo, Socialismo y Lousteau). La elección en los distritos más importantes se polarizó y le fue parcialmente bien a los dos que se benefician con la grieta.

El oficialismo dio el batacazo en Córdoba y San Luis. Lo de Entre Ríos y Santa Cruz era anunciado, en Santa Fe no los complicó el affaire con Boasso y va a tener más legisladores a nivel general si se confirma la tendencia en octubre. En Capital Federal ratificó su hegemonía de la mano de Carrió y sin embargo ante una eventual futura ruptura (Lilita tiene muchas en su haber) se hace difícil precisar si los votos son de ella o del Pro. En el debe se puede mencionar que hizo la segunda peor cosecha de medio término desde la vuelta de la democracia. Sacó 34,2 % a nivel nacional (la peor fue la de De La Rua en 2001 con 23,8 %. Y la tercera peor fue la de Cristina Fernández en 2009 con 34,9 %).

La oposición justicialista ganó en Santa Fe, Buenos Aires, Tucumán, Chaco, el departamento Rosario  y recuperó el segundo lugar en Capital.

La elección de medio término es un plebiscito de la gestión nacional. Siete de cada diez argentinos, votan alternativas al oficialismo y siete de cada diez, alternativas al justicialismo. Por ahora.

Para Cambiemos, es naturalmente más fácil mostrar unidad por detentar el poder y la chequera y para el justicialismo, más difícil.

Hacia el corazón del justicialismo, perdieron todos los gobernadores que discutían la conducción a Cristina, salvo Urtubey. ¿Podrá disputar a partir de octubre su liderazgo desde Salta y con un discurso de “avenida del medio”? Al calor de la polarización, no parece viable. Perdieron con alevosía los dos que quisieron contender la provincia de Buenos Aires a Cristina Fernández (Massa y Randazzo). Ella, procesada, con la mayoría de los medios de comunicación en contra y en “la provincia más importante de América del Sur”, como diría Juan Manuel de Rosas, le habría ganado, según los indicios con que se cuentan hoy al candidato de Vidal (la principal figura de cambiemos a nivel nacional) en una elección con ribetes épicos, donde se habrían manipulado los datos del escrutinio provisorio. El tándem Rossi – Rodenas ganó en Santa Fe. Rossi se mostró como el candidato de CFK y Rodenas la valoró. Filmus, ministro de Cristina, recuperó el segundo lugar en Capital. Los triunfos de Unidad Ciudadana en Buenos Aires y Santa Fe fueron por menos porcentaje que los de Cambiemos en Córdoba y Capital.

Lo ocurrido con el escrutinio provisorio  en los dos distritos importantes en donde perdió el oficialismo, hace indispensable la presencia de veedores internacionales para octubre.

En las definitivas, los justicialistas recordarán a Perón: «La conducción es un arte de ejecución simple: acierta el que gana y desacierta el que pierde. Y no hay otra cosa que hacer. La suprema elocuencia de la conducción está en que si es buena, resulta y si es mala, no resulta. El conductor es un constructor de éxitos». El candidato de Cristina perdió en 2015 y se recupera ahora. Si quiere conducir, deberá además, persuadir sin mandar y aprender humildemente de sus errores pasados.

La derrota de las “avenidas del medio” se profundizará. En octubre votará más gente que en las Paso. Los dos polos intentarán convencer a estos y a los que se irán del medio. El resultado dependerá de este y solo dos factores más: la economía que está en manos de Cambiemos y lo que la opinión pública piense de la misma de cara al futuro. Por ejemplo, si va mal y va a seguir peor o si va mal pero va a mejorar. Pase lo que pase, se consolidarán como las dos identidades mayoritarias y aglutinantes. Todo lo demás es ciencia ficción o expresión de deseo.

* Docente de las materias Historia Constitucional Argentina y Latinoamericana de la Facultad de Derecho UNR y Vicepresidente del Instituto de Derecho Público y Ciencia Política del Colegio de Abogados de Rosario.