La presidenta del Concejo Municipal de Rosario, María Eugenia Schmuck, se refirió este miércoles a la grave crisis que enfrenta el transporte en la ciudad y al debate sobre una posible declaración de la emergencia en este tema y aseguró que «estamos ante un cambio de paradigma» y que el transporte público ya no va a «volver a funcionar como antes». Más allá de los efectos de la pandemia, la concejala consideró que hay que marchar hacia un nuevo modelo porque la gente ha adoptado nuevos hábitos, por lo cual barajó la posibilidad de un modelo con menos líneas y que privilegie las frecuencias por sobre los recorridos.
«Ya hace varios meses que la secretaria de Movilidad de Rosario, Eva Jokanovich, fue al Concejo y puso sobre la mesa la realidad económica y la realidad estructrual del trasnporte», recordó Schmuck. «Quedó claro que no vamos a volver a tener el transporte que cortaba 450.000 boletos por día. La pandemia y los paros han desfinanciado el sistema, que está funcionando con el 55 % de la recaudación, entre 60.000 y 70.000 boletos diarios y con el 90% de las actividades abiertas», explicó la funcionaria.
En ese sentido, Schmuck consideró que hay un cambio de hábitos en la sociedad y esto implicará un cambio de paradigmas en el modelo de transporte. «Hay varias razones para esto, la gente se cuida por el virus, pero también ha adoptado nuevas costumbres, utiliza bicicleta, va con un familiar, en moto, caminando y le sale más barato y se ha acostumbrado. Entonces estamos ante un cambio de paradigmas y el transporte ya no va a funcionar como era antes»
En cuanto a la declaración de la emergencia, Schmuck afirmó que la medida que quiere adoptar el intendente Pablo Javkin le parece acertada, porque pone en debate cual es el sistema posible, el real». «Tenemos que dejar de tener un pliego que no refleja ninguna posibilidad genuina de que pueda sostenerse, ni con la Nación, ni con la Provincia ni con el propio Municipo»
La edila explicó que el intendente le ha pedido que convoque a cada uno de los bloques para sentarse personalmente con cada uno de ellos para trabajar con los lineamientos que ya tiene. «Queremos que la propuesta concreta sea entre todos, es una situación que lo amerita, nadie tiene la receta tenemos que trabajarlo juntos para encontrar un modelo posible».
En cuanto a ese modelo posible, Schmuck no dio mayores precisiones, pero arriesgo que tal vez «haya que empezar a caminar más» y se empiece a privilegiar las frecuencias por sobre los recorridos y garantizar que llegue a toda la ciudad.
