La presidenta del Partido GEN a nivel nacional, Margarita Stolbizer, desembarcó en la ciudad de Rosario para discutir posturas y políticas a futuro. En ese sentido, destacó el rol y la trayectoria del intendente Pablo Javkin, al tiempo que atribuyó a la provincia de Santa Fe el lugar de “paraíso”, pensando en términos políticos y en contraposición a lo observado en el plano nacional, marcado por la polarización.
“Reconociendo las dificultades y las diferencias que existen en todo el territorio nacional, Santa Fe es el modelo ideal en el cual una tercera posición, como es el caso del Frente Progresista, es muy fuerte. Entonces nos sentimos muy cómodos en lo ideológico pero también sentimos que estamos disputando poder en serio”, manifestó en diálogo con Conclusión.
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En ese sentido recordó que “el Frente Progresista se retiró del gobierno provincial con una imagen muy alta, con conocimiento” y haber enfrentado la pandemia en la provincia de Santa Fe de esta manera, es gracias a “un sistema de salud que se dejó instalado por el Frente Progresista”.
“Esto nos da una gran comodidad. Venir a Santa Fe y tener estas reuniones con aliados, como será ahora con el intendente -Pablo Javkin-, una persona a la que también reconocemos muchísimo su trayectoria y sobre todas las cosas, creemos que hay que discutir a futuro”, apuntó y completó: “ Javkin es un aliado estratégico pensando esa Argentina de futuro”.
En la misma línea, Stolbizer dijo que “venir a Santa Fe, en términos políticos, es medio el paraíso, pensando en las posibilidades del Frente Progresista” en contraposición a lo que observa a nivel nacional donde “la polarización se ha ido acentuando peligrosamente”.
“La grieta es un buen negocio electoral para quienes lo expresan pero es un mal negocio para el país. Un país no puede tener un proyecto de crecimiento si no es sobre la base de la articulación de las políticas públicas de quienes están en distintos ámbitos, el diálogo, la construcción de políticas de estado de mediano y largo plazo, y eso no es lo que está ocurriendo en el plano nacional”, describió preocupada.
No obstante, le dejó un lugar a la “esperanza”: “Lamentablemente también veo una sociedad muy polarizada, agrietada. Pero sigue habiendo un espacio porque la sociedad se va cansando de los políticos que se preocupan solamente de sus propios intereses y mucho menos de la agenda social”.
“Estamos trabajando para que se entienda que no es bueno para el país seguir con esta idea de la confrontación”, enfatizó.
En cuanto a la figura presidencial, marcó que Alberto Fernández sufrió un “debilitamiento” en se sentido. “Cambió desde aquel primer momento de la pandemia, cuando se plantó y mostró su voluntad de articular políticas con el Jefe de Gobierno porteño -Horacio Rodríguez Larreta-, con el gobernador de la provincia de Buenos Aires -Axel Kicillof-, convocando a los demás gobernadores, y todo eso se fue diluyendo”.
Por último, en relación al reciente fallo contra el empresario Lázaro Báez, dijo que fue “un buen mensaje de la Justicia que exista una condena por un delito importante como es el lavado de dinero y una persona que ha hecho una fortuna inmensa por sus negocios con el Estado y apropiándose de lo que le hubiera correspondido a los argentinos; la sentencia es buena”.
Consultada respecto a cómo esta resolución puede “complicar” a la vice presidenta Cristina Kircher, dijo que “puede rozarla más en lo simbólico que en lo jurídico”.
“En lo jurídico los procesos son autónomos y esta causa solamente investiga el lavado de dinero de la familia Báez y algunas otras personas del sector privado. No ha tocado la impunidad de los poderosos, que sigue en pie, y que se investiga en otras causas que lamentablemente transitan con la lentitud propia del sistema judicial argentino”, explicó.
Ya cerrando indicó: “En estas otras causas se investiga el origen sucio del dinero, que en este caso es la corrupción y los negocios con el Estado. Si bien hay una relación, las investigaciones son independientes. A mí juicio, todas las causas tienen pruebas suficientes y contundentes pero hay que ser pacientes con la lentitud del sistema judicial”.
