El Gobierno estudia modificaciones para que la ayuda alimentaria se implemente de manera eficiente en las comunidades de pueblos originarios.

La iniciativa fue confirmada por la presidenta del Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales, Victoria Tolosa Paz, quien puso a modo de ejemplo que en el distrito salteño de Santa Victoria Este «hay sólo dos almacenes con posnet».

En ese sentido, la funcionaria nacional señaló que tanto su área como el Ministerio de Desarrollo Social y el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) «trabajan para garantizar la llegada de la ayuda alimentaria de otra manera de lo que hace la tarjeta».

En declaraciones radiales, la dirigente oficialista indicó que se está evaluando la «entrega de módulos» o que los beneficiarios puedan «cobrar el monto de la tarjeta junto con la Asignación Universal por Hijo», ya que las comunidades originarias se suelen organizar para ir a los lugares de cobro todos juntos el día en que se acreditan los distintos planes del Gobierno.

«Buscamos alternativas para reemplazar a la tarjeta alimentaria en las comunidades originarias», remarcó.

La tarjeta Alimentar tiene como una de las bases de implementación la imposibilidad de que los beneficiarios puedan cobrar el dinero en efectivo: sólo puede usarse para la compra de alimentos y a través del uso del plástico.

La iniciativa se da en medio de la trágica situación que enfrenta la comunidad wichí, principalmente en Salta: en lo que va del año ya murieron siete miembros de ese pueblo por desnutrición.