Un hombre de 94 años fue detenido hoy en la localidad bonaerense de Caseros, acusado de matar a balazos a dos mujeres que se encargaban de cuidarlo y a un sobrino, en un caso donde se sospechaba que actuó por una cuestión de índole económica. El hecho se produjo este lunes alrededor de las 13:00 en una vivienda ubicada en la calle Tres de Febrero 3882, al noroeste del Gran Buenos Aires.

El supuesto agresor, identificado como Antonio Pignotti, tenía en su poder una pistola Tala calibre 22 cuando fue detenido por personal policial.

Intervino personal del Comando de Patrullas de la Policía de Tres de Febrero y Policía local, quienes al llegar a la vivienda encontraron el cuerpo sin vida de Hubert Rubén Buffoni, de 60 años, sobrino del agresor, quien se encontraba tendido en el piso con una herida de bala en la espalda.

Las otras dos víctimas resultaron ser dos mujeres, madre e hija, que se encargaban de cuidar al presunto homicida.

Las dos mujeres fueron encontradas por la Policía gravemente heridas y trasladadas de urgencia al Hospital Carillo, donde ambas fallecieron como consecuencia de las heridas de bala recibidas.

La mayor de las mujeres, Ana María López, de 84 años, presentaba un impacto en la cabeza y su hija, Miriam Esther Segovia, de 50 años, uno en el pecho.

Fuentes policiales precisaron que tras las averiguaciones practicadas se pudo establecer que el imputado, por razones de índole económica, se habría visto perjudicado por las victimas y por eso decidió disparar contra ellas con un arma de fuego.

«Estoy cansado que me roben», habría dicho el acusado cuando llegó la Policía.

Otra testimonio dio cuenta de que el hombre le habría dado plata a su sobrino para que construyera una vivienda y ésta nunca se hizo.

Una versión distinta dio una vecina de nombre Ana, prima de una de las víctimas.

«Quería aclarar que este hombre no era un ex de Prefectura Naval como están diciendo. Fue colectivero, camionero, vendía y compraba autos», dijo la mujer.

Además, aclaró: «Decían que Huber le sacaba plata y no era cierto. Mi primo era el único que trataba de cuidarlo».

«Lo querían internar porque lo veían mal», aseguró la mujer en declaraciones a la prensa.