Mediante el decreto Nro. 295, el Ejecutivo provincial resolvió terminar el fideicomioso que se había constituido durante el gobierno de Miguel Lifschitz para explotar la autopista Rosario – Santa Fe. Dicho fideicomiso era administrado por el Banco Municipal Rosario que como canon, obtenía el 2 por ciento de todo lo recaudado.

“Ese dinero vuelve ahora a la provincia”, dijo la ministra de Infraestructura, Silvina Frana. “Habíamos perdido el control de la autopista hasta en los detalles más pequeños, como el corte de pasto. Eso es lo que se cambia”, agregó.

Según explicó la funcionaria, el gobierno decidió que la administración del corredor quede a cargo de Vialidad Provincial, a través de una unidad ejecutora transitoria.

“La intención es que en el plazo de un año podamos tener sancionada una ley que autorice la constitución de una unidad ejecutora con participación mayoritaria del estado para administrar la autopista”, detalló.

Frana destacó que el decreto también plantea la realización de una revisión de todas las actuaciones a través de la Sindicatura General de la provincia y Tribunal de Cuentas.

La ministra indicó que se mantendrá el sistema de cobro de peajes.