El presidente del Concejo Municipal, Miguel Zamarini, junto a la Plataforma Animalista Rosario (PAR), convocaron a una reunión en el Concejo, para tratar el conflicto entre carreros y activistas, con el fin de aclarar dudas y llegar a acuerdos.

El evento convocado por el concejal, tiene por objeto reunir en la metodología de mesa redonda a carreros, animalistas, ecologistas, ediles, funcionarios municipales y ciudadanía en general.

Zamarini aclaró que esta mesa de diálogo se propuso como una salida a la falta de comunicación desde el municipio no solo hacia la ciudadanía en general sino también -y fundamentalmente- hacia los recolectores informales y las organizaciones que velan por el bienestar de los animales.

«Desde que se anunció el programa de erradicación de tracción a sangre han habido periódicamente en la ciudad protestas de los recolectores informales reclamando por no ser tomados en consideración a la hora de la búsqueda de solución de esta problemática sin, además, comunicarles debidamente cuáles serán las propuestas laborales para que abandonen su actividad» sostuvo Zamarini.

En tanto, desde la PAR sostienen que entre las inconsistencias del programa Andando la más inquietante es el reemplazo de la tracción a sangre animal por la humana, ya que entre las alternativas a los carros la intendencia propone carros tirados manualmente o bicicletas con carros adosados.

Los carreros, por su parte, han manifestado su inconformidad con el programa anunciado en base a que tanto el valor por el que adquieren un caballo como la capacidad de carga en los actuales carros es varias veces superior al de una bicicleta con carro o un carro manual, sin que el municipio tome nota de ello.

«Otro de los interrogantes es dónde van a ir a parar los caballos canjeados por las alternativas que propone el Ejecutivo, ya que, hasta donde sabemos, no existen en la a provincia espacios destinados a alojar y recuperar a esos animales y además tampoco se expresa claramente la ubicación de la granja mencionada por el ejecutivo y el estado de los caballos que afirman fueron llevados allí» advierten desde la Plataforma Animalista.

«Nuestra obligación es velar no solo por el bienestar de las familias que dependen de la recolección informal -que entendemos son muchas más que las 1.500 que afirma el municipio- sino también por el destino y el bienestar de los caballos que merecen un trato digno y humano» sostuvo Miguel Zamarini.

En concordancia con lo expresado por el presidente del Concejo, la PAR explicó que el relevamiento por el que la Municipalidad afirma que existen 1.500 carros tirados por caballos es incompleto y desactualizado, ya que cuando hace más de tres años se comenzó con el censo, este no fue terminado y de los pocos datos obtenidos se perdió una gran parte de la información. «Se hace difícil para nosotros creer que el Departamento Ejecutivo quiere buscar una solución a la tracción a sangre cuando ni siquiera sabe a ciencia cierta qué cantidad de animales transitan hoy con carros las calles de la ciudad», indicaron. A la vez, desde la ONG estiman en más de 3.000 la cantidad de equinos que están siendo utilizados para la recolección informal.